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Enrique Yunta
Viernes, 1 de julio 2016, 15:52
La esperada salida de Vicente del Bosque de la selección española ha sido mucho más agitada de lo previsto. Se va el técnico que llevó a España al cielo de Sudáfrica y que conquistó la Eurocopa de 2012, reconocido ese mérito en cualquier rincón del ... planeta, pero lo hace con una frase dura, poco frecuente en él esa reflexión en voz alta. «Casillas estuvo perfecto con los jugadores, pero con el cuerpo técnico», desveló Del Bosque. ¿Qué ha pasado, pues, para que haya esta distancia entre dos símbolos de la selección?
La «dulce transición»
Del Bosque ya anunció después del Mundial de Brasil que preparaba para Casillas una «dulce transición», dando a entender que se le iba a buscar sustituto cuando ya tenía en mente a De Gea. Durante la fase de clasificación, Casillas fue el titular en la mayoría de partidos, pero el guardameta del Manchester United participó en partidos importantes y en amistosos de peso como el de Italia, en marzo. Ahí entendió que seguramente no iba a ser titular en la Eurocopa.
Falta de diálogo
Casillas no recibió ninguna notificación sobre su suplencia hasta que Del Bosque, en un encuentro casual por el hotel de la Isla de Ré, le comentó la situación. Aunque Casillas seguramente ya se había hecho a la idea, confirmó que su cueva la ocuparía otro y que ese hecho suponía el fin a una etapa preciosa. 167 internacionalidades después, el portero de España era otro. Aunque Del Bosque no suele dar explicaciones, el meta esperaba que tuviera con él un trato diferente por todos los años de servicio.
Charla confusa
En otros eventos, cuando España ya estaba clasificada después de los dos primeros partidos, el portero suplente actuaba en el tercero. No ha sido el caso, también porque la selección se jugaba mucho contra Croacia (terminar primera de grupo), pero en una charla con Ochotorena, preparador de porteros, se dio a entender que Casillas podría jugar en Burdeos. No fue así.
Dos caras
Resulta que Casillas, según Del Bosque, no se ha portado bien con el cuerpo técnico e incluso retiró el saludo al entrenador y a sus compañeros. Sin embargo, todas las imágenes que se han visto de Casillas son ejemplares. Ejercía de capitán en el banquillo, animaba al resto, y hasta Del Bosque explicó que fue el primero en ayudar a De Gea cuando estalló el caso Torbe. Algo se torció en el momento de saber que iba a ser suplente.
Despedida fría
De hecho, ni la ha habido, pues Del Bosque envío un mensaje a todos los jugadores menos a Casillas. Tampoco en Barajas hubo palabras ni saludos, así que se zanjó de mala manera. Una relación fracturada entre dos leyendas de España, pendientes de una charla para aclarar lo sucedido.
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