«Un bloque compacto y una estrella»

Entre 2016 y 2020, el delantero militó en las filas del Gornik Zabrze, uno de los clubes históricos polacos. Fue 'Pichichi' dos veces y en otro par de temporadas quedó segundo en la lista de los máximos realizadores de la Ekstraklasa. 88 tantos en 154 partidos con el Gornik avalan la trayectoria de Angulo, quien la pasada temporada defendió el escudo del Goa indio. Cuando se le pide un análisis del próximo rival de España, el vizcaíno pone el acento en su estabilidad. «Polonia es un bloque homogéneo, prácticamente el mismo que estuvo en el Mundial de Rusia. Se conocen a la perfección, son competitivos, duros, y cuentan con el mejor delantero del mundo». Así define a Lewandowski, quien viene de una campaña de ensueño -«batió el récord de Gerd Müller con 41 goles», recuerda el bilbaíno- y ahora está sometido a una gran presión para sacar del atolladero a su selección.

No hay ninguna duda de que España parte como clara favorita ante los polacos, por fútbol, juego e internacionales. Pero también lo fue contra Suecia y no pudo hacerse con los tres puntos. «Si alguien piensa que la selección va a golear con facilidad a Polonia, se equivoca. Llevan mucho tiempo juntos, tienen las ideas claras y saben cómo llevarlas a cabo. Sus bandas son peligrosas, con gente vertical, y Lewandowski no necesita nada para hacer daño», advierte Angulo. A pesar de que el 'killer' de Varsovia solo lleva dos goles con su país en los grandes torneos, el vizcaíno aconseja vigilarle muy de cerca, a ser posible con dos hombres, para dejarle sin espacios y margen de maniobra. Darle un centímetro significa entregarle munición.

Más allá de Lewandowski, Angulo destaca a varios internacionales polacos. Le gusta mucho el portero Wojciech Szczęsny, un gigantón de 1'96 que juega en la Juventus. «Es muy bueno, titular indiscutible con su selección y con su club. Hablamos de un tipo muy seguro bajo los palos». El meta lleva 52 internacionalidades con su país desde 2009 y acaba de cerrar una campaña con la 'Juve' en la que ha disputado un total de 37 encuentros. También destaca al central Kamil Glik, un veterano curtido en mil batallas, con pasado en las categorías inferiores del Real Madrid y luego reclutado por Palermo, Bari, Torino, Mónaco y Benevento. Pero no se olvida, ni mucho menos, de Piotr Zielinski, del Nápoles, un mediapunta que también actúa como extremo. «Hay que tenerle muy en cuenta. Es habilidoso, rápido y con gol». De hecho, en la última Serie A anotó ocho tantos y dio 11 asistencias.

¿Cómo será el guion del partido? «Creo que Polonia jugará parecido a Suecia. Esperará atrás y luego saldrá rápido buscando las bandas y, por supuesto, a Lewandowski», avanza Angulo. A España se le atragantan los rivales que se amurallan y que acumulan gente por delante de su portería, pero esta vez no podrá fallar y perdonar tanto como ante los escandinavos si quiere sacar un billete para los octavos. «La selección no tiene que cambiar nada. Debe seguir jugando igual, con su estilo, porque lo único que faltó con los suecos fue el gol». El bilbaíno advierte además de que los centroeuropeos llegan con tres bajas importantísimas: Piatek y Milik se cayeron de la convocatoria por lesión y Krychowiak vio la doble amarilla contra Eslovaquia -«la segunda me pareció rigurosa», apunta Angulo-. «Los dos primeros aportan goles y les echarán de menos».

Solo quedan unas pocas horas para que el balón vuelva a rodar en La Cartuja, donde España tiene que ganar para respirar. Hasta ahora, La Roja se ha medido a Polonia diez veces y el balance es magnífico: ocho victorias, un empate y una sola derrota. Esta última se produjo en Barcelona en noviembre de 1980 (1-2). Prehistoria, otra vida. Aun así, Igor Angulo pide cero confianza y salir a por todas. Ve en Lewandowski una amenaza terrible, permanente. «Que le vigilen dos. Por si acaso», previene.