Salvador Gomar entra en la carrera electoral para presidir la FEF

Salvador Gomar, máximo dirigente de la Federación Valenciana, entró este martes en la carrera electoral para convertirse en candidato a los comicios a la presidencia de la Federación Española de Fútbol (FEF), contra Rafael Louzán (Federación Gallega), condenado por prevaricación y repudiado por el Gobierno, y Sergio Merchán (Federación Extremeña), delfín del inhabilitado Pedro Rocha. Gomar ha decidido dar marcha atrás y presentarse a las elecciones fijadas para el próximo día 16, mientras que Juanma Morales, el único aspirante externo a la FEF, se ha quedado fuera de la lucha al no haber logrado los 21 avales exigidos para ser proclamado candidato.

El nuevo presidente de la FEF será por tanto uno de los barones de la FEF, representante del poder establecido en un organismo caracterizado por el sistema clientelar y que ha visto cómo sus tres últimos máximos dirigentes han sido inhabilitados: Ángel Villar, Luis Rubiales y Pedro Rocha. En el día del cierre del plazo de presentación de candidaturas Salvador Gomar, miembro de la junta directiva de la FEF desde diciembre de 2018, dio el paso definitivo al conseguir 26 avales, entre ellos, de los presidentes de las territoriales vascas, balear, andaluza y castellano-manchega.

Frente al presidente de la Valenciana y la amenaza de que que surgiese un candidato ajeno a la FEF que pusiese en peligro el continuismo, Louzán ha conseguido 55 apoyos, mientras que Merchán ha llegado a los 25. En el caso de que Louzán - pendiente de una resolución del Supremo tras ser condenado con siete años de inhabilitación para ocupar cargo público- no pudiese hacer oficial su candidatura, las elecciones se reducirían a una batalla entre Merchán y Gomar.

El presidente de la Federación Valenciana ha sido respaldado por el sector de asambleístas que se oponen a perpetuar el poder establecido en la FEF. Entre los 19 presidentes de territoriales que no aceptan a Louzán ni a quien fuera el secretario general de Rocha en la Extremeña, Merchán, se encuentra el máximo dirigente de la Guipuzcoana. Manu Díaz lamenta públicamente que «el proceso electoral en las elecciones a la FEF es medieval y absolutamente dirigible» y exige que el organismo federativo, siempre bajo sospecha, recupere su credibilidad.

Mientras tanto, con el CSD a la expectativa, Miguel Galán, azote de Villar, Rubiales y Rocha, ya ha decidido presentar una impugnación ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) para tumbar la candidatura de Louzán, y también una denuncia contra Merchán por incumplimiento de neutralidad al solicitar ambos avales al sindicato de futbolistas AFE.