Triste final a la fiesta del Pradejón

El encuentro era histórico para el Pradejón, pero también para sus rivales. Dos equipos humildes ante la oportunidad de sus vidas, pero solo podía haber un ganador. Y los de Daniel Ramos arrancaron mejor, con ganas de demostrar ante su gente que querían jugar ese duelo ante un 'Primera'. Así, Salah, Íker y Mario disfrutaron de los primeros acercamientos de un encuentro entre dos equipos que, ante todo, no querían cometer errores.

Esa era la premisa principal, pero poco tardó el Pradejón en no cumplirla. Se lo puso demasiado fácil a sus oponentes en el minuto 25 y Lucas no desaprovechó la opción para hacer el 0-1. El tanto supuso un jarro de agua fría, pero los locales se repusieron. Siguieron atacando y acabaron mejor el primer acto. Tanto que en el minuto 40 hallaron el gol del empate gracias a Mario Cordón. Todo quedaba abierto para el segundo tiempo.

El Pradejón había acabado mejor y también volvió con más intensidad de los vestuarios. Sin embargo, los riojanos volvieron a mostrarse frágiles en defensa y Rodrigo sacó partido de esas facilidades para anotar el 1-2 en el minuto 52. Segundo mazazo y de ese le costó más reponerse al bloque de Ramos. De hecho, los asturianos pudieron dejar sentenciada la contienda poco después, pero la defensa riojabajeña pudo sacar, sobre la línea, el esférico.

El Pradejón salió de ese bache y empezó a mover su banquillo en busca de soluciones. Lo intentaron los riojanos empujados por su público, pero en muchas ocasiones pecaron de precipitación y malas decisiones. Y cuando las oportunidades aparecieron, ahí estaba la defensa del Atlético de Lugones para mandarlas al traste. Dani Garrido tuvo cerca la igualada, pero Rafael se estiró y con él todos sus compañeros del Atlético de Lugones. Ellos se llevaron un premio que el Pradejón vio cercano. Se quedó sin él, pero para el recuerdo quedará el partido de este miércoles. La fiesta, eso sí, no fue completa.