El Formentera obra el milagro en San Mamés

El conjunto vizcaíno llega a este encuentro encadenando una ligera mejoría en los últimos partidos, tanto de juego como de resultados; y quizás más focalizado en el siempre esperado en Bilbao Athletic-Real Madrid liguero del sábado que en la visita de un rival de Segunda B contra el que quiere hacer valer tanto la escueta ventaja de la ida como la diferencia de categoría.

Para lograr ese objetivo, que es más una obligación, la apuesta en la alineación de José Ángel 'Cuco' Ziganda es una completa incógnita. Ya que, aunque se esperan, las rotaciones del técnico navarro son cada vez más imprevisibles.

Así, no estaba claro ni el portero hasta que se ha conocido que Kepa Arrizabalaga, titular en Formentera, sufrió un esguince de tobillo en Riazor. Ello prácticamente asegura que será Iago Herrerín quien salga entre palos en un once inicial donde no se espera ni a Aritz Aduriz ni a Iñaki Williams, que acumularon tres partidos completos la pasada semana. Los tres muy exigentes.

En la ida en Formentera, Cuco apostó por poco habituales como Enric Saborit y Ager Aketxe, casi inéditos como Sabin Merino y Kike Sola, y un par de 'cachorros' del Bilbao Athletic: Oscar Gil e Iñigo Muñoz. Pero estado de necesidad de técnico y equipo quizás le lleven a presentar un equipo más reconocible.

En esa línea iría una defensa con Lekue -suplente en Riazor-, Etxeita, Laporte, que será baja por tarjetas ante el Real Madrid, y el propio Saborit; un doble pivote formado por Mikel San José y Vesga, con lo que daría descanso para el sábado al esperado Ander Iturraspe-Mikel Rico frente a los de Zinedine Zidane; y un ataque con Markel Susaeta, Ager Aketxe, Iñigo Córdoba y Raúl García. Los tres últimos suplentes ante el Deportivo.

Aunque también podrían entrar en el once Eneko Bóveda, Unai Núñez y/o Mikel Balenziaga, titulares en defensa en La Coruña. Como también Aduriz, Williams y hasta Sabin Merino y Sola.

A la espera de si Kepa podrá sentarse en el banquillo, son bajas seguras los lesionados de larga duración Iker Muniain y Beñat Etxebarria. Y parece que también Óscar de Marcos, que se lesionó en un pie el domingo, y Yeray Álvarez, quien ya está a disposición de Ziganda pero sin haber trabajado aún demasiado con la exigencia física que demanda una vuelta a los terrenos de juego, tras superar el cáncer testicular del que recayó en junio y que necesitó de quimioterapia.

La Sociedad Deportiva Formentera afronta el partido de vuelta en La Catedral con el objetivo de apurar hasta el final sus opciones, intactas, tras el 1-1 de la ida en la isla balear.

Unos 300 aficionados acompañarán al equipo pitiuso en la catedral del fútbol español, a la espera de que se materialice el milagro de seguir vivo ante un rival histórico en la competición del K.O.

El Formentera, decimocuarto en el Grupo III de Segunda B, se presentará en Bilbao con la mejor racha de la temporada en esa categoría, ya que no pierde desde hace cuatro jornadas.

Es la segunda ocasión consecutiva que el equipo balear llega a los dieciseisavos de final de la Copa para enfrentarse a un equipo de Primera División. La pasada campaña fue eliminado por el Sevilla, tras encajar una goleada (1-5) en el partido de ida disputado en el estadio Sant Francesc de Formentera.

El técnico del conjunto formenterense, Tito García Sanjuán, no podrá sentarse en el banquillo de San Mamés, ya que arrastra una sanción de cuatro partidos tras ser expulsado en un partido de Liga ante el Olot. Es baja en el once del Formentera el defensa canario Dailos Tejera; y serán duda hasta última hora el delantero brasileño Bruno Vinicius y el defensa ghanés Fobi Kinsgley.

El Formentera ha logrado el milagro de eliminar al Athletic Club en San Mamés en la última jugada de una eliminatoria que el Athletic Club tenía en ventaja desde la ida en la isla pitiusa y que decidió un cabezazo de Álvaro Muñíz a saque de córner de Omar Álvarez en la vuelta en La Catedral.

Fue el justo premio a la entereza y la ilusión de un equipo de Segunda B que fue capaz de aguantar de pie a uno de Primera División y que supo aprovechar sus oportunidad cuando se le presentó. Ya casi con el partido acabado.

Y un justo castigo a la impericia del Athletic sobre la meta rival, ante la cual generó multitud de ocasiones aunque sin ser capaz de aprovecharlas en una noche aciaga de Iñaki Williams y en la que a José Ángel Ziganda no le valió ni poner sobre el terreno de juego en la segunda mitad a Aritz Aduriz, Ander Iturraspe y Raúl García.

Comenzó mandando el Athletic, aunque de forma tímida y sin apenas generar peligro en el área rival, a pesar de los intentos de Sabin, Córdoba, Sabotit y Williams por acelerar las acciones al borde del área. Sí lograban los leones provocar córneres, sin demasiado éxito. Como tampoco lo tuvo el Formentera en su intentos de montar algún contragolpe que inquietase a Herrerín.

El choque, aburrido hasta entonces y con una impresionante tromba caída mediada la primera mitad, empezó a animarse cuando apareció Aketxe. El fino media punta local probó a Marcos en el minuto 21 con un gran disparo desde lejos que el meta sevillano solo pudo despejar hacia adelante, sin que ningún delantero rojiblanco aprovechase la oportunidad. Como tampoco lo hizo inmediatamente después Williams, tras pared con Sabin Merino. El disparo del delantero bilbaíno, como otro posterior de Saborit también prometedor, fue bloqueado por la defensa azul.

La ocasión más clara del Athletic fue una jugada en un saque de esquina de Aketxe que Sabin peinó en el primer palo y Williams remachó en el área pequeña. Pero un defensa sacó bajo palos cuando el gol parecía claro y después se produjo un barullo en el pudo haber mano. Un par de golpes francos de Aketxe, el primero peligrosísimo para Marcos tras tocar en la barrera, dio paso al descanso.

Insistió el Athletic a vuelta de vestuarios, pero Sabin remató demasiado flojo en la primera oportunidad y la segunda se le fue desviada a Williams, que conectó un buen cabezazo a centro de Lekue.

Pararon un poco los de Ziganda, pero mediada la segunda parte arreciaron tanto sobre la meta rival como la ingente lluvia que caía. Así, ya con Aduriz sobre el terreno de juego, el Athletic encadenó hasta seis ocasiones en seis minutos. Abrió la batería Saborit, continuó un Williams cegado, que tuvo dos, siguió Córdoba y finalizó Aduriz con dos claras a un despeje de Marcos que le cayó en los pies

Antes de las de Aduriz, Omar dio el primer aviso con un disparo alto de Omar. Lo volvió a intentar Liñán y Bonilla puso un nudo en la garganta en los apenas 15.000 espectadores que este miércoles se atrevieron a acudir a San Mamés con un cabezazo que Iago despejó a córner. Otro disparo de Omar ya dejó claro que el Formentera creía en el milagro y que los últimos minutos iban a ser un calvario para los locales. Una agonía con la que no fueron capaces de acabar ni Córdoba ni Williams en los dos buenos contraataques de los que dispusieron.

Y bien que lo pagaron porque con el partido acabado un despiste de Lekue propició un córner que botó Omar y con él Álvaro clasificó al Formentera para los octavos de final.