El Atlético firma una victoria de prestigio ante el City

Fue un duelo competido, equilibrado, que los colchoneros resolvieron en la segunda mitad, tras el clásico carrusel de cambios que perjudicó más en esta ocasión al equipo de Guardiola. Memphis y Carrasco, de sendos lanzamientos desde fuera del área, sellaron los goles de una victoria prestigiosa que no suma puntos ni vale eliminatorias, pero sí eleva la autoestima, la confianza y la convicción de que se trabaja en el camino correcto.

La cita se abrió con tres cuartos de hora largos de retraso por culpa de una tromba de agua en Seúl, pero era poco amistosa. Y es que estos dos equipos terminaron con tanganas la última vez que se enfrentaron, hace dos años en un cruce de Champions con sufrido triunfo de los 'citizens'. Que habría batalla lo evidenciaron Azpilicueta y Grealish desde el primer minuto. Pegajoso el navarro, que pronto recibió el castigo de una amarilla, y gesticulante y protestón el inglés.

Guardiola y Simeone pusieron en escena dos onces que bien podrían ser titulares. Toda una declaración de intenciones. En los ingleses ya no están Mahrez y Gündogan, en Arabia Saudí y en el Barça respectivamente, y en los madrileños hubo alguna novedad. Oblak recuperó su lugar bajo palos tras una larga lesión por problemas de cervicales y Soyuncu, notable todo el partido, ejerció de central en lugar de Savic, con Witsel y Hermoso en el eje y Azpilicueta y Samuel Lino en los carriles.

Como es previsible, mucha posesión del City, que con su clásica presión alta dificultó la salida desde atrás del Atlético. Sin embargo, ese mayor control no se tradujo en grandes ocasiones durante el primer acto, más allá de algunos remates de Halaand y Bernando Silva atajados por el portero esloveno.

Incluso fueron los colchoneros los que pudieron adelantarse en un par de transiciones, muy bien llevadas por Samu Lino. El jugador que actuó cedido en el Valencia el curso pasado le está encantando al Cholo. Sale de carrilero zurdo en ausencia de Reinildo y de Carrasco, pero se mueve bien por todas las zonas y es trabajador y atrevido, por momentos desequilibrantes. Dos grandes pases del brasileño no supieron transformarlos en gol ni Morata, mal perfilado, ni Lemar, muy cansado.

Quea no era un mero trámite quedó claro al ver que solo los porteros titulares se quedaron en la caseta tras el descanso. Pronto, Ortega se lució para desviar un cabezazo a bocajarro de Lino. Reclamaron gol los colchoneros, pero no había VAR. En el otro área, un disparo tremendo de Walker se estrelló en el travesaño de Gbric, inmenso poco después para desbaratar un mano a mano con Julián Álvarez.

Con media hora por delante sí que Pep y el Cholo decidieron modificar casi por completo su equipos y actuar con dos onces alternativos. Aunque es indiscutible que el City tiene mucha más profundidad de banquillo, el Atlético creció. Avisaron Correa y Barrios antes de que Memphis aprovechase una dejada del argentino para abrir el choque con un enorme golpeo.

Desaprovechó poco después el ex del Barça una ocasión mucho más clara que la del gol para anotar el segundo, pero lanzó contra el muñeco tras un contragolpe de manual. Con el City bastante desorientado y caótico, fue Yannick Carrasco el que aumentó la diferencia. El belga se lo guisó y el belga se lo comió con un derechazo. Acortó distancias Rúben Dias a la salida de un córner, ejecutado por Sergi Gómez, pero ya el partido estaba muriendo. Buena imagen del Atlético, pero mucha mesura.