Fútbol base

El árbitro salva la vida de un niño durante un partido de Infantil en Pradoviejo

Acababa de comenzar el segundo tiempo del partido que enfrentaba al Laurus con el Tedeón cuando dos jugadores golpearon sus cabezas para llevarse la posesión del balón. La futbolista navarretana salió ilesa mientras que el de Logroño se cayó sin dar muestras de consciencia sobre el tapete haciendo saltar todas las alarmas. El encuentro se paró y las gradas empezaron a pedir a gritos atención sanitaria. «No puedo explicar la angustia que vivimos todos en aquel momento; unos llamaron al 112, otros bajaron a pedir ayuda a los de la entrada mientras dos enfermeras que estaban viendo el partido bajaron deprisa al campo», relata apenada una de las madres que presenció la escena.

La actuación arbitral, tal y como narra la espectadora, fue clave para salvar la vida del joven ya que «enseguida adivinó lo que le ocurría por lo que le puso de lado y le sacó la lengua de la boca para que no se ahogara». El futbolista permaneció inconsciente un par de minutos, pero no fue hasta pasados los diez minutos cuando un personal de la Cruz Roja apareció por el campo número siete de la instalación para ayudar. «Es una vergüenza que un gran centro deportivo como es Pradoviejo tan solo tenga un punto de socorro, en el que había una única persona, para atender a los cientos de niños y niñas que había jugando esa mañana», alerta la madre.

La ínfima atención sanitaria que estaba presente en el recinto llegó «en un coche de golf diez minutos después de haberle alertado» y eso, explica ella, «que estábamos en el mismo recinto». Poco después se personó una ambulancia, aunque la pesadilla aún no había terminado del todo.

El vehículo no pudo entrar hasta el interior del césped ya que la medida de las vallas del campo de fútbol número siete impedía su acceso. Por lo que, tal y como narra la madre de uno de los jugadores del Tedeón, «los sanitario tuvieron que aparcar la ambulancia, entrar andando al recinto y correr hasta el otro extremo del campo donde había ocurrido el incidente». «No entiendo cómo no se han medido las verjas de la valla para permitir que una ambulancia entre a los campos», se pregunta.

Este duro episodio vuelve a abrir el debate sobre la presencia y los recursos médicos que disponen los recintos deportivos en La Rioja. Es por ello, que esta madre ha querido poner una queja sobre lo vivido y solicita «tener al menos un médico, que se ubique en un lugar estratégico en mitad del complejo deportivo, para que pueda acceder de una manera rápida y eficaz a todos los campos». «La diferencia entre eso y nada es la de salvar una vida», concluye.