Alexis salva el honor de Wenger y 'mancilla' el de Guardiola

Aunque en los primeros 45 minutos el City tuvo las mejores ocasiones y hasta marcó un gol Sterling que finalmente anulado porque según el árbitro el balón había sobrepasado la línea de fondo, pero que debió haber subido al marcador, hubo que esperar a la segunda parte para encontrar goles en Wembley. Tampoco había subido al marcador otra diana, esta vez de Koscielny, anulada por fuera de juego.

Ya en la reanudación, golpeó primero el City. Yaya Touré le robo la cartera a Ramsey en la frontal de su área y lanzó el balón a la carrera de Agüero, que aplastó a Monreal en velocidad para plantarse ante Petr Cech y superarle con una vaselina.

Diez minutos después, el propio Monreal se cobraría venganza firmando el tanto del empate. Una situación peculiar que permiten los esquemas con tres centrales es que uno de los carrileros centre y el otro remate en el segundo palo el envío. Ocurrió en el gol del Arsenal: Oxlade-Chamberlain la colgó desde el flanco derecho, y el navarro apareció desde el izquierdo para embocar el esférico en la portería de Claudio Bravo.

Tras el empate, el City pudo volver a adelantarse hasta en dos ocasiones, en sendos remates a la madera de Yaya Touré y Fernandinho, el primero desde fuera del área y el segundo en un saque de esquina. Tras el arreón, el Arsenal estuvo a punto de darle la vuelta al marcador con un disparo de Welbeck que lamió el poste derecho de la meta de Claudio Bravo.

Sin más ocasiones se llegó a la prórroga, y una vez allí las mejores corrieron a cargo del equipo 'gunner'. La tuvo Holding en un córner, pero su remate salió ligeramente desviado; y precisamente en un córner llegó el segundo tanto de los pupilos de Arsene Wenger. Welbeck no alcanzó a enganchar el balón, que le quedó muerto a Alexis Sánchez en las inmediaciones del área pequeña, donde, como es habitual, el chileno no perdonó.

Welbeck tuvo la sentencia, y después Delph rozó el empate en un contragolpe, aunque el encuentro murió sin ocasiones claras en el tramo final. Salvo que Wenger decida quedarse contra pronóstico, el alsaciano dejará el Arsenal tras 20 años, como mínimo, en la final de Copa.