Salvador de vidas y nuevo héroe del fútbol checo

Con unas gradas paralizadas por el horror, Koné, que juega en el FC Slovacko desde 2015, se lanzó inmediatamente a asistir a su rival. «Estaba muy cerca, porque yo también estuve en esa acción», explicó la agencia AFP el jugador que con su acción evitó que el portero pudiese ahogarse con su propia lengua, que se habría tragado, antes de que llegaran las asistencias médicas del club local, obligadas a esperar que el árbitro les autorizase a entrar en el terreno de juego y, después, recorrer los 60 metros que separaban el banquillo del lugar donde se produjo el incidente.

«En este tipo de situación, cada segundo cuenta. La persona que se traga la lengua comienza a ahogarse. Hay que actuar lo más rápido posible», explicó a la AFP un portavoz del club de la capital checa, Tomas Mutinsky. «Si Martin se encuentra hoy en situación estable, gran parte del mérito es de Francis», destaca.

Hasta los aficionados del Bohemians 1905 de Praga han agradecido el gesto del delantero africano. «Ruego al FC Slovacko que transmita mi agradecimiento a Koné. Hoy me ha enseñado algo. Y no sólo a mí», escribió en Twitter uno de los hinchas. Otro fan que asistió al encuentro publicó en la web del club una especie de reportaje sobre el impacto que la gesta de Koné ha tenido en el grupo de seguidores ultras del Bohemians.

«Dos tipos están sentados a mi lado. Racistas. Su vocabulario es el negro y el mono. Y ocurre el choque. Segundos interminables. Martin está tirado en el suelo y no se mueve. Koné es el primero en llegar. Saca la lengua al portero. Un rival. Un negro. Todo el estadio se calla. Los dos tipos también. Me importa un bledo el resultado (0-0). Martin estará bien, Francis Koné le ha ayudado. ¿Un rival? ¿Un negro? ¡Un hombre!», escribió dicho aficionado.

«No, no tengo formación médica», sonríe Koné, nacido en Bondoukou, ciudad del nordeste de Costa de Marfil, pero que decidió jugar en la selección de Togo, el país de origen de su madre, con el que debutó el 14 de junio de 2013 frente a Libia (0-2). «Pero cuando ocurre algo así, siempre compruebo que el jugador no se haya tragado la lengua», explica el delantero.

«Es la cuarta vez que me pasa. Una en Tailandia y dos en África», recuerda este jugador de 26 años, que tiene ya una larga carrera como futbolista. Antes de llegar al FC Slovacko, jugó en Tailandia (Muangthong United FC y PTT Rayong FC), en Omán (Al-Musannah SC), en Portugal (SC Olhanense) y en Hungría (Honved de Budapest).

«Quiero dar las gracias a Francis Koné, cuya rapidez me ha salvado. Una vez más, ¡GRACIAS!», escribió en Facebook Berkovec, que ha mostrado su deseo de verse pronto con su salvador.

«Me ha invitado a cenar», confiesa Francis Koné.