La continuidad de Khedira, en el aire

Ya hace casi un año, antes de que Khedira se rompiese la rodilla derecha y estuviese seis meses de baja, la renovación del alemán era una de las prioridades de Florentino Pérez, por lo que el club llegó incluso a rechazar en el mercado de invierno una sorprendente oferta de 40 millones de euros procedente del Manchester United. Carlo Ancelotti también ha insistido en renovarle, porque considera al mediocentro alemán un jugador básico en su esquema, ya que prefiere a Khedira antes que al inexperto Illarramendi y, mucho más, tras la marcha de Xabi Alonso y Di María. Sus ausencias han dejado muy coja la medular, ahora demasiado corta de efectivos, también sin Casemiro, pese a los refuerzos de Kroos y el mediapunta James, interior izquierdo con Ancelotti. Sin embargo, Khedira no ha manifestado al Real Madrid su deseo de prolongar su contrato y el club blanco se teme ahora que el alemán que costó 10 millones y cobra 3,2 millones netos por temporada desee abandonar en junio para obtener un suculento contrato en otra entidad, tras haber rechazado la renovación en varias ocasiones.

En el caso de que Khedira, pretendido por el Arsenal, pretenda marcharse con la carta de libertad, esta vez el Real Madrid sí intentará traspasarle en enero, para obtener un beneficio lógico después de cinco temporadas en el club, con el que ha conquistado Copa de Europa, Liga y Copa (dos), además del título mundial con su selección en Brasil. Khedira regresó el miércoles a los entrenamientos del equipo blanco después de estar un mes y medio de baja a causa de una rotura muscular en su pierna izquierda y vuelve a aspirar a la titularidad, aunque por el momento la línea de tres en el medio campo es intocable con Modric, Kroos y James.

Cinco millones anuales

Para intentar garantizarse al jugador al menos un trienio más -ahora tiene 27 años-, el Real Madrid se plantea aumentar el sueldo de Khedira y ofrecer a un jugador tan criticado por su perfil defensivo y su falta de calidad hasta cinco millones por temporada. En el caso de que el centrocampista de Stuttgart no quiera continuar, el campeón continental comenzaría a negociar un posible traspaso a principios del próximo año, por no menos de 15 millones de euros, y la controversia con el centrocampista iría en aumento. Se vería entonces amenazado de perderse los grandes compromisos, después de haber llegado a tiempo de disputar la Champions en Lisboa, porque Ancelotti le quiso tener en la final pese a no estar en forma.

El pasado mes de septiembre Khedira aprovechó para someterse a un artroscopia en su rodilla sana, la izquierda, pero no juega desde el partido de la segunda jornada de Liga contra la Real Sociedad en Anoeta, tras la lesión muscular que sufrió con la selección de su país. Aunque su regreso aún sería precipitado, una vez reincorporado al grupo Ancelotti vuelve a contar con Khedira como uno más. En teoría, en competencia directa con su compatriota Kroos, aunque el técnico italiano considera que este nuevo fichaje «es polivalente y los jugadores con inteligencia táctica no tienen dificultades para estar en una posición distinta».