Estado en el que ha quedado la cima del Serradero, tras haber sido limpiada por Unipublic. Diego Marín A.

La Vuelta limpia la meta de Moncalvillo

Unipublic ha encargado la recogida de la basura que había quedado en la cima del Serradero nada más enterarse de que habían quedado restos en el área empleada en la octava etapa

Diego Marín A.

Logroño

Viernes, 30 de octubre 2020, 19:14

Dicho y hecho. Si este jueves mostrábamos las imágenes de la cima del Serradero, en plena Sierra del Moncalvillo, donde finalizó el pasado miércoles la octava etapa de la Vuelta, con restos de basura, ahora debemos informar igualmente de que la zona ... ha sido rápidamente limpiada. Unipublic, empresa organizadora de la Vuelta, se ha puesto en contacto a primera hora de este viernes con la Mancomunidad de los Pueblos del Moncalvillo, de la que es presidente el alcalde de Fuenmayor, Alberto Peso, quien por cierto otorgó el premio al vencedor de la etapa, Primoz Roglic (Jumbo Visma), junto al alcalde de Hornos, Antonio Mayoral; y han solucionado el problema con rapidez.

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«Se ha puesto en contacto con nosotros Unipublic y nos ha pedido el contacto de alguna empresa de limpieza para arreglarlo», explica Alberto Peso, quien ha recomendado a Valoriza, que trabaja para el Ayuntamiento de Fuenmayor, y esta ha sido contratada por la organización de la Vuelta para acudir al Alto del Moncalvillo (1.491 metros) a limpiar lo que había quedado sucio. «Lo han solucionado rápidamente, coordinado por nosotros. A primera hora estaba ya todo limpio, han puesto todo el interés del mundo», explica Peso, para quien la organización ha sido «ejemplar» y justifica el problema de la limpieza como «un malentendido». De hecho, el trabajo de limpieza de la basura que había quedado, sobre todo botellas vacías y bolsas de papel y cartón, apenas ha durado unos minutos, aunque se han llenado media docena de bolsas de basura, porque «estaba todo más o menos recogido, en montones», describe el presidente de la Mancomunidad de los Pueblos del Moncalvillo.

Así pues, solucionado el pequeño borrón que había dejado la preciosa y emocionante etapa riojana de la Vuelta, el recuerdo que queda ahora es todo positivo y la afición espera ya que se pueda repetir una etapa de similares características en próximas ediciones. Porque aunque la Vuelta ya había pasado muchas veces antes por La Rioja, y había vivido finales en alto en la Cruz de la Demanda y Valdezcaray, en Ezcaray, todo el recorrido, que transcurrió por La Rioja Alta, el Camero Viejo y el Nuevo y la Sierra del Moncalvillo, ha exhibido una región en esplendor gracias al otoño, que le sienta tan bien a las viñas y a los bosques de nuestra región.

Diego Marín A.

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