Chaves rompe al Movistar y al Katusha

Después de esa contrarreloj por equipos testimonial, la primera etapa en línea, con un final duro, muy duro, para el inicio de una prueba de tres semanas, el Caminito del Rey parecía conducir a un enfrentamiento entre el Movistar (Valverde y Quintana) y el Katusha (Purito Rodríguez) y lo que nos encontramos fue la aparición de un colombiano, Esteban Chaves, que hizo trizas todas las estrategias y se convirtió no sólo en el ganador de la etapa sino en un líder que tiene una renta de segundos importante a su favor.

El Orica, la formación que dirige Neil Stephens, llevaba tiempo buscando un líder para las pruebas de tres semanas y fichó a este colombiano con una sonrisa eterna al que los problemas físicos, las lesiones, le han impedido mostrar todo el potencial que se le supone a un ganador del Tour del Porvenir, se impuso en esa prueba en 2011, y al que una grave lesión estuvo a punto de apartar de forma definitiva del ciclismo.

Chaves, un ciclista menudo, pudo con un Nairo Quintana que fue el único de los grandes favoritos de la Vuelta que de dejó ver en la parte final de la etapa, junto a Nicolás Roche y Tom Dumoulin. Fue un día extraño, con dos equipos, Movistar y Katusha, realizando la mayor parte del trabajo hasta que a falta de seis kilómetros apareció el Orica y luego el Tinkoff.

Quintana quiso y no pudo, pero al menos se dejó ver, mientras que Valverde, Purito y Froome estuvieron más escondidos, todos ellos en pocos segundos, pero sin mostrarse en ningún momento en las primeras posiciones, sin esa chispa que normalmente suelen tener en las grandes ocasiones.

Un superviviente

A tres kilómetros buscó abrir hueco Quintana y a partir de ese momento la etapa entró en una nueva dinámica. Chaves, 25 años, natural de Cundinamarca, está de rojo y sacó los colores a todos los favoritos. Lo normal es que la carrera se le haga muy larga. Hasta que ese momento llegue deberán de pasar un buen número de etapas.

Lo que más llama la atención en Chaves es que ahora mismo podría estar viendo la Vuelta a España por televisión. El parte médico que emitieron en Italia después del accidente que sufrió en el Trofeo de Laigueglia en 2013 después de estabilizar su cuerpo hacía que temblasen las letras que escribieron los médicos: fractura descompuesta de la clavícula derecha, fractura de un huesecillo del oído izquierdo, fractura malar (arco cigomático), del seno maxilar y del esfenoides derecho. Todo ello unido a una pérdida de memoria debido a un trauma cráneoencefálico que le duró cuatro días. Cuando le preguntan por ese accidente, Esteban dijo: «Las esperanzas de volver a montar en bicicleta eran sólo de un cincuenta por ciento». Lo peor lo tenía en la clavícula.

Fue lo que más le costó recuperar, los movimientos de la articulación. Primero consiguió volver a la normalidad desde un punto de vista médico. Le quedaba volver a coger el ritmo de la competición y eso es lo que continúa haciendo, de forma métódica.

A pesar de su situación clínica, el Orica, Neil Stephens, le firmaron por tres temporadas y respetaron su contrato. Le dejaron recuperarse poco a poco. El año pasado logró triunfar en sendas etapas de la Vuelta a California y en la Vuelta a Suiza. Es un 'rara avis' dentro de un grupo formado para conseguir triunfos individuales y las clásicas. Es el primer corredor del que dispone Orica para las grandes pruebas del calendario.

Una carrera de tres semanas que no tenga una montonera, una caída multitudinaria, no sería una prueba de tres semanas. A 33 kilómetros de la meta se produjo un enganchón entre varios ciclistas que acabó con unos cien corredores implicados, de una forma u otra, en ella.

Nibali, atrapado

Niemiec (Lampre) acabaría en el hospital junto al australiano Tanner (IAM). Paolo Tiralongo (Astana) permanecía sentado en el suelo con un golpe importante en la cara. Sagan fue otro de los que se vio atrapado en ese percance. Nacer Bouhanni fue otro de los que no se libró de echar pie al suelo. Vincenzo Nibali se vio atrapado entre el amasijo de bicicletas y piernas que se formó.

Astana dejó delante a Aru y Landa y puso con Nibali a Cataldo y Diego Rosa. Más tarde se les uniría Vanotti, y luego Andrey Zeits, que llevó a Nibali a cola del grupo principal. Sus compañeros se pegaron una gran paliza para reintegrarle al grupo de los mejores, llegó a perder 1:30, pero finalmente pagó los esfuerzos y perdió un tiempo importante. Después, los jueces comprobaron que el siciliano se había agarrado al coche y le expulsaron de la carrera

La verdad es que Nibali no está teniendo mucha fortuna esta temporada. De un Tour desafortunado, en el que no estuvo en ningún momento en carrera, ha pasado a una Vuelta a España que se le ha cruzado demasiado pronto.

Si el triunfo de Chaves es llamativo, que decir de Tom Dumoulin, un gran contrarrelojista que sólo cedió un segundo con Chaves, -prácticamente le tapaba con su físico al colombiano puesto que es mucho más grande que él-, y también de Nicolás Roche, el mejor de un Sky que situó a tres corredores entre los once mejores, Froome y Mikel Nieve fueron los otros dos que le acompañaron.

La Vuelta a España ha permitido ver muy pronto a nombres que no parecían contar para la general. La falta de ritmo, de competición, por la que atraviesan muchos de los favoritos se dejó notar. La igualdad entre los mejores, que se movieron en segundos, permite pensar en una carrera muy igualada, en la que las bonificaciones jugarán un papel importante hasta que lleguen las grandes jornadas de montaña.