Vuelta por Villoslada, Las Torrecillas y Peña Hincada desde El Rasillo

Llegar hasta este punto desde la carretera LR-333 requiere tener buenas piernas y armarse de tesón para afrontar una subida de 10 kilómetros por camino en la que se salvan algo más de 500 metros de desnivel. Un puertecito de nada que deja lo mejor para el final, con rampas cortas pero muy duras que superan ampliamente el 15% de inclinación. Ahí es nada. Lo dicho, conviene paciencia, adoptar un ritmo prudente y si se va acompañado, pues mucho mejor. En la ruta que reproducimos hoy en estas líneas, la compañía de Roberto y Willy, dos buenos amigos de Montemediano, contribuyó a hacer mucho más llevadera la 'trepada' hasta los riscos de Las Torrecillas.

Como contrapartida al esfuerzo, la remontada por el valle del río Viciercas envuelve al ciclista entre portentosas manchas boscosas de hayas y pinos antes de asomarse, ya casi arriba, a una zona de pastizales con vistas abiertas también hacia la Sierra de Urbión. Al salir del pinar, transcurridos ya 6 kilómetros de subida, será inevitable hacer una paradita para contemplar un paisaje por el que suelen merodear ciervos, corzos y jabalíes.

El resto de la etapa discurre por territorios que ya hemos hollado en otras entregas de Rutas en BTT, pero no por ello vamos a dejar de destacar, aunque sea someramente, sus cualidades para gozar de una buena escapada en bicicleta de montaña. Es el caso del sendero GR 190, que cae desde el puerto de Peña Hincada hasta los caminos de Ortigosa. Pura diversión durante 2 kilómetros que descenso inmersos en un cerrado bosque de montaña. Se trata de un tramo para juguetear que llega casi al final de un recorrido que suma en total 42 kilómetros y pico. Los 16 primeros, entre El Rasillo y Villoslada, discurren sobre todo por caminos y pista bien conservados, siempre entre magníficos bosques con los robles como especie más destacada, y miradores naturales en algunos puntos en los que no está demás hacer una parada.

Y no podemos concluir nuestra cita de hoy sin mentar también la visión panorámica de sierras y barrancos que se obtiene desde el camino que baja desde el Torruco de las Mentiras hacia Peña Hincada. Y también sería injusto no mencionar el tramito de sendero que cierra el recorrido antes de concluir en El Rasillo. Es un descenso muy corto entre pinos, pero que saca al ciclista una gran sonrisa como guinda final a otra excelente ruta en bicicleta de montaña.

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