Ascensión a Peña Bajenza por Viguera y la senda de Miraflores

Objetivo de marchas senderistas que parten desde Islallana para trepar hasta Peña Bajenza por sus senderos, la cima se puede alcanzar también en bicicleta de montaña. Y esa es precisamente la ruta que planteamos hoy desde estas líneas. Una ascensión hasta la cruz de esta montaña, con salida en Logroño y subida por Viguera y la senda de Miraflores. El descenso desde la cima, también entre sendas, conduce hasta la enriscada ermita de San Marcos antes de que el recorrido retome de nuevo el camino del Iregua y la senda del Río Antiguo que se dirige hacia Prado Salobre y Lardero sobre las lomas de la margen izquierda del río.

La marcha que ha inspirado esta nueva entrega de Rutas en BTT se realizó el pasado 14 de diciembre con un guía de excepción como Lukas Rioja, incombustible rutero de BTT que hoy lidera el equipo y escuela de mountain bike Osga Kdds Riojanas, algunos de cuyos jóvenes miembros formaron parte también de la grupeta que surcó las sendas y caminos de esta merindad de La Rioja media.

Las sendas son la parte más difícil, pero también la más divertida de esta ruta. Hay tramos duros en subida a través de la senda de Miraflores, que se toma desde un camino que sube desde las canteras de Viguera, pero también descensos trepidantes, como el que cae desde Peña Bajenza por un terreno de monte bajo buscando la ermita de San Marcos. Reseñable es igualmente la senda que se descuelga desde las dehesas de Valdetorre hasta casi la misma cruz de la peña. Cruzada una rústica portilla, se inicia un sendero pedregoso y tosco al principio que se empina peligrosamente poco después antes de tornarse finalmente en una trocha algo más llevadera, aunque sin dejar de sorprender con pequeños obstáculos. En subida o en bajada, las sendas demandan una buena técnica sobre la bicicleta, que nos aportará seguridad y confianza para afrontar las dificultades amplificando al mismo tiempo el nivel de satisfacción y diversión sobre nuestra montura, especialmente en los descensos.

De los casi 53 kilómetros de recorrido de la ruta, los 12 que transitan por los montes y barrancos de Viguera son lo mejor de esta ruta, aunque también los más exigentes. A los amantes del llano les gustará más rodar por los caminos de la vega del Iregua, desde Logroño hasta casi Viguera, siempre siguiendo el trayecto de la Vía Romana por un entorno apacible de huertas y árboledas, con el río siempre a nuestros piés.

El retorno hacia la capital riojana se realiza también por territorio llano, pero rodando esta vez por el sendero que sigue el canal del llamado río Antiguo durante un buen trecho. Poco antes de las instalaciones deportivas de Prado Salobre se enfila por la Cuesta de las Vacas en un rapidísimo descenso en el que hay que sortear alguna complicada rodera que nunca está en el mismo sitio. Desde este punto hasta Logroño restan unos 7 kilómetros de asfalto que vienen bien para soltar piernas y dejar que nuestras pulsaciones aterricen a niveles de recuperación.

Puedes descargar la ruta aquí