El Grafometal muere en la orilla

Mediada la primera mitad el Guardés vio cómo cuatro jugadoras eran excluidas en muy poco espacio de tiempo. Hubo una defensa que solo tenían tres efectivos en pista las gallegas.

Después de un tiempo muerto del Guardés (6-4) el Grafometal firmó sus mejores minutos. Atrás, Geandra echó la verja a la portería y paró todo lo que le llegaba. Y en ataque los goles caían de todas las formas posibles: Tavares desde el extremo, Paula en la línea de seis metros y Marina desde lejos. Resultado: 10-5 y desconcierto en un Guardés que comparecía en el Palacio sin conocer la derrota.

Cambió la decoración, las gallegas se pusieron serias, y lideradas por Cecilia Cacheda empataron el partido en pocos minutos. Un gol de Marina permitió a las riojanas irse al descanso con ventaja (11-10).

El retorno de las riojanas no pudo ser peor. Juanjo González pidió tiempo muerto a los cinco minutos después de que las suyas no lograran ningún gol y fueran por detrás en el marcador (11-13). Tuvo efecto: 13-13. Dos goles de Lewandowski.

Entonces se detuvo el juego durante más de diez minutos por un problema en el marcador. Un parón que no le sentó bien a las riojanas que, poco a poco, veían cómo el partido se les hacía demasiado largo. Cecilia cogió las riendas del juego y encontró los espacios que en la primera parte no pudo.

Intentó Juanjo González parar el partido, atacar siete contra seis... Pero el Guardés había metido una marcha más y se mostraba más seguro que en la primera mitad.

A un solo gol

Llegaron a ponerse las riojanas a dos goles (18-20 y 19-21). Marina encontró un hueco imposible y puso el partido al borde del infarto (20-21). Incluso desperdició el Grafometal un ataque para empatar a falta de dos minutos. Medio minuto y Blanca sube el 21-22 al marcador.

Presión en toda la pista de las riojanas y tiempo muerto con veinte segundos por jugar y aviso de pasivo para las gallegas. Cecilia Cacheda, ¡cómo no!, se la jugó y estableció el definitivo marcador 21-23.