

Secciones
Servicios
Destacamos
El empate ante el Viveros Herol Nava ya es pasado y el Ciudad de Logroño ya está centrado en su próximo compromiso liguero que le ... trae de vuelta al Palacio para medirse el sábado al Guadalajara (17.30 horas), un equipo que tiene la soga del descenso al cuello. Sin embargo, pese a que el encuentro en tierras segovianas finalizó en lo deportivo el choque puede continuar en los despachos. De hecho, el delegado federativo presente en aquel duelo dejó reflejado en el acta un incidente que tuvo lugar al finalizar el partido y que podría condicionar a los franjivino para el siguiente encuentro.
Durante los minutos finales, Roly Uríos tuvo un rifirrafe con Isaías Guardiola después de que el pivote recibiera un codazo del mellizo. Una vez concluido el encuentro, el incidente continuó y a la discusión se sumaron jugadores de ambos equipos como Luisfe Jiménez, que estaba en la grada, Gonzalo Carró o Josip Zaja.
Ahora, ambos equipos están a la espera de lo que dictamine el Comité Nacional de Competición, que se reúne este miércoles o jueves para ver si el episodio penaliza a algunos de los participantes de la pelea.
Más allá de eso, el equipo de la capital comenzó a trabajar ayer con la mente puesta en el Guadalajara, un equipo que ocupa la penúltima plaza de la clasificación junto a Anaitasuna y Benidorm. El equipo alcarreño llega a tierras riojanas después de caen en casa ante el Atlético Valladolid (24-29) aunque le jornada anterior derrotó en Pamplona al Helvetia Anaitasuna (27-29) y en el primer encuentro de la segunda al Servigroup Benidorm (37-31), dos rivales directos en la lucha por la permanencia de la Liga Asobal.
Más allá del empate en Nava, el equipo franjivino es otro muy distinto al de hace un par de meses. Después de un noviembre para el olvido, los riojanos encadenaron victorias frente al Huesca, Ademar y Cangas, cayeron ante el Barça, ajustadamente frente al Bidasoa e igualaron con el Nava.
A partir de ahora, y más allá de que el equipo dirigido por Miguel Ángel Velasco sueñe con acercarse a la zona noble (el cuarto clasificado, el Bidasoa, suma ocho puntos más), el objetivo es ganar los encuentros de casa sin fiarse de nadie. Y menos de un equipo como el Guadalajara. «A partir de ahora son todas finales», explicó el entrenador. «Vamos a tener muchos partidos en casa contra equipos que están abajo con el agua al cuello y si te despistas se te van a arrimar porque no están a tanta distancia. Sabemos que las finales pueden caer para cualquiera de los dos lados pero queremos seguir con solidez para seguir sumando», agregó.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.