A Galicia para empezar y a León para terminar

A los de Miguel Ángel Velasco les ha tocado en suerte un trayecto muy equilibrado en el que se alternan duelos frente a los equipos llamados, en principio, a ocupar las primeras posiciones de la tabla con otros frente a rivales que se prevé que peleen por huir de las posiciones de castigo de la tabla clasificatoria. Cabe recordar que los logroñeses acabaron la pasada campaña en una más que digna quinta plaza y que tendrán que compaginar su concurso en el campeonato doméstico con su participación en la EHF Liga Europea, honor que se ganaron al proclamarse subcampeones de Copa.

Así, la liga comenzará el 9 de septiembre, una semana después de que los franjivino disputen la Supercopa Ibérica, una competición de la que podrán formar parte al haberse librado de la fase previa del torneo continental. Su primer oponente será un Cangas que sufrió para mantenerse en la máxima categoría del balonmano nacional. De hecho, tuvo que disputar una eliminatoria ante el Trops Málaga de la que resultó vencedor y con la que selló su continuidad en Asobal.

Siete días más tarde, le llegaré el turno al debut en el Palacio de los Deportes. Será ante el Bada Huesca y acto seguido los riojanos viajarán a tierras valencianas para verse las caras con el Puerto Sagunto, uno de los dos recién ascendidos. A partir de ahí, arrancará la que seguramente sea la parte más dura del campeonato para los franjivino, puesto que medirán sus fuerzas contra el Bidasoa, el todopoderoso Barcelona, el Torrelavega, el Valladolid y el Cuenca.

La primera vuelta finalizará el 13 de diciembre y la segunda mitad de la competición concluirá con la visita al siempre complicado feudo del Ademar. Antes, los riojanos habrán recibido en Logroño al Blendio Sinfín de Garabaya en la penúltima jornada y habrán visitado al Granollers en la antepenúltima. Serán esos los partidos decisivos para definir el puesto final de un equipo, el de Velasco, que afronta, un año más, una campaña ilusionante.

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