Un retorno para quedarse

Este lunes era el turno de vestirse de corto, pisar de nuevo la pista del Palacio de los Deportes, donde el equipo disputará sus encuentros como local, y sudar en el gimnasio. Y también de lanzar mensajes de cara a la campaña.

Y primó la calma y la humildad. En un proyecto que ha cambiado más en los despachos que en la pista, Jacinto Carbajal fue claro a la hora de cifrar los objetivos: «Hay que tener los pies en el suelo, ir dejando rivales por debajo. No podemos pensar en cotas más altas». «Estamos contentos con el equipo, con mucha continuidad y alguna cara nueva», analizaba el entrenador y también director deportivo.

Porque los cambios en el club han marcado la pretemporada. Primero fue la salida de Luis Birigay y de una decena de técnicos de cantera y, hace unas jornadas, el adiós de Luis Cacho, alma máter de la Fundación Promete, que deja el club para ocupar la Consejería de Educación y Cultura. «La suerte es que el club tiene una idea muy clara y un proyecto estable. Luis afronta un reto en su vida profesional y da un paso a un lado, pero hay estructura y gente», explicaba Carbajal. «En otro club con tanto cambio se hubieran tambaleado los cimientos. Aquí no ha ocurrido porque había una base muy sólida de idea, de proyecto», incidía.

En lo deportivo, destacó el retorno de Paula Estebas, que tras una temporada fuera vuelve a su casa. «Me encanta Logroño. La experiencia con Araski fue muy buena, pero quiero más cosas, como estudiar, y tenía que volver», analizaba. Para la exterior riojana, la plantilla tiene «muy buena pinta», aunque mantuvo el mensaje templado de Carbajal. «Está muy bien pensar en cotas muy altas, pero la experiencia nos dice que hay que pensar en cada partido, sobre todo en el primero, que llega en menos de un mes. Se puede soñar, pero con los pies en el suelo», reflexionaba.

Junto a la riojana, también se ejercitaron en el Palacio el último fichaje del Promete, Ani Calvo, las balcánicas Maja Stamenkovic, Carmen Miloglav, Mima Ivanovic y Adrijana Knezevic, y la jamaicana Vanessa Gidden. Una plantilla que sólo contaba con Estebas como jugadora nacional hasta la incorporación de Ani Calvo. «Cuando llegamos al mercado había corrido mucho y las jugadoras españolas se podían contar con los dedos de una mano. Ha sido complicado en este sentido, pero podemos estar contentos», concluía.