Es evidente que el Rioverde Clavijo no está a la altura de los grandes de la liga, pero este domingo demostró ante el líder, un potentísimo Leyma Coruña, que no da la salvación por perdida, que con los nuevos mimbres va a dar mucha guerra ... hasta el final. Los blanquiazules recuperaron el éspíritu de antaño y dieron un susto tremendo al primer clasificado. No pudo respirar hasta el final el cuadro visitante, pero ganó por 88-94 a un Clavijo que, sin embargo, se llenó de esperanza.
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El conjunto coruñés vino a Logroño con la intención de no pasar apuros y salió con la quinta marcha puesta. 2-14 en apenas cinco minutos. Mala pinta.
Pero los cambios en la plantilla blanquiazul han dado un vuelco al equipo. Ahora este Clavijo sí que es de Oro. Lo de los Urtasun es una lección de baloncesto constante. Kolo es el cinco poderoso que tanto se ha echado de menos y Marc Peñarroya mostró en su estreno sus hechuras para dirigir al Rioverde. Y con esto se puede competir. Y, además, el próximo fin de semana vuelve Tamba.
Se enchufaron Knudsen y los gemelos navarros. Y hubo noticia en el Palacio porque el Clavijo se enganchó al duelo a base de triples. Cinco de ocho en el primer cuarto. Lo nunca visto.
Rioverde Clavijo
Moreno, Kolo (12), Knudsen (19), Txemi Urtasun (22) y Nicolau (4) -cinco inicial -; Peñarroya (7), Arbosa, Álex Urtasun (15), Treviño (4) y De Miguel (5).
88
-
94
Leyma Coruña
Aris (7), Huskic (17), Barrueta (18), Mc Donnell (2) y Galán (9) -cinco inicial -; Jakovics (20), Lundqvist, Diagne (2), P. Hernández, Font (4), A. Hernández (2) y Burjanadze (12).
Parciales 17-18, 41-45 (descanso); 62-67 y 88-94 (final).
Árbitros Rial, García y Chueca. Eliminados Aris y Peñarroya.
Kolo se sumó a la fiesta y Álex Urtasun puso a los locales por delante (25-24). El partido estaba bonito, porque al Leyma da gusto verle. En donde ve una grieta abre una puerta. Los coruñeses mantuvieron sus prestaciones ofensivas. Al descanso estaban en sus números, 45 puntos, la mitad de los 90 que atesora de media. Y el Clavijo estaba ahí, solo a cuatro, en la mejor primera parte del curso, por el juego, por el rival, e incluso por la defensa.
Retornaron de vestuarios los de Diego Epifanio con las pilas puestas y con ocho puntos seguidos abrieron de nuevo la brecha (51-62). Se aferraron a los triples los logroñeses y quedó todo para el último cuarto. Hacía tiempo que no se veía un partido a este nivel del Clavijo.
Tanto quedó pendiente que el Clavijo trató de tú al Coruña. Ni colista, ni líder. De igual a igual. Los de Jenaro Díaz se pudieron por delante (70-69), con los coruñeses contra las cuerdas. Pero Huskic y Burjanadze asumieron el mando e hicieron respirar a los suyos (72-79). No se rindió el Rioverde. No estaba el partido para tirar la toalla.
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Se entró en el último minutos con opciones reales. 86-89. Huskic anotó, respondió rápido Txemi Urtasun y JJakovics sumó de media distancia. Final del sueño. El Clavijo ilusionó, el Coruña se llevó un buen susto.
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