Irving y Durant dejan la serie ante los Celtics vista para sentencia

Los Celtics, que evitaron la derrota el viernes con un heroico Jayson Tatum (50 puntos), solo pudieron plantar cara en el primer cuarto porque el 'Big 3' de los Nets fue después una apisonadora.

Irving, de nuevo abucheado por su antigua afición, logró 39 puntos y 11 rebotes, Durant 42 puntos y James Harden otros 23 puntos y 18 asistencias. Un seguidor de los Boston Celtics fue arrestado después de que arrojara una botella de agua al base cuando se retiraba a vestuarios.

Entre los tres se encargaron de 104 de los 141 puntos de los Nets, que ya avistan un enfrentamiento más complicado en la segunda ronda ante los Milwaukee Bucks de Giannis Antetokounmpo. Frente a ellos, Tatum volvió a brillar con 40 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias pero estuvo demasiado solo en ataque sin su socio Jaylen Brown, lesionado para todos los playoffs.

Empujados por los 17.000 aficionados que llenaban por primera vez este año el TD Garden, en Boston, los Celtics arrancaron con fuerza el partido en un intento de compensar con intensidad el insólito talento que acumulan los Nets.

Con 9 tempranos puntos de Tatum, Boston tomaba pequeñas ventajas en el primer cuarto pero, a diferencia del viernes, Kyrie Irving estaba esta vez totalmente metido en el partido. El base, que calentó su regreso al TD Garden con unas declaraciones sobre el racismo en Boston, respondió a los silbidos con un recital de manejo de balón y canastas de todo tipo. En el segundo cuarto, los Nets apretaron la defensa sobre Tatum, evitando que anotara en ese parcial, y pusieron la directa hasta irse al descanso con ventaja 73-60.

Sin intención de jugar más partidos de los necesarios, las estrellas de los Nets mantuvieron la intensidad y a 1 minuto para el final del tercer cuarto se combinaban para 84 puntos, uno más de los que llevaba todo el equipo de Boston, que caía 107-83.

Los Celtics llegaron a reducir la distancia a 14 puntos en el último cuarto pero Nash mantuvo a sus figuras en cancha hasta asegurar el triunfo.