Magic Johnson asume el reto de devolver la grandeza a los Lakers

La decisión adoptada por la dueña de los Lakers, Jeanie Buss, viene acompañada del despido del hasta ahora gerente general, Mitch Kupchak, y del hermano de éste, Jim, quien ejercía de vicepresidente ejecutivo a cargo de la parcela deportiva. De este modo, el que fuera base de los Lakers en los años ochenta rendirá cuentas directamente ante Buss, quien ha renovado su confianza en el entrenador del equipo, Luke Walton, con quien la franquicia firma un balance de 19 victorias y 39 derrotas en lo que va de campaña.

"Hoy tomé una de las decisiones que creo que devolverán a los Lakers a los puestos de arriba", ha señalado Buss en el comunicado en el que da cuenta de los cambios adoptados. "Earvin Johnson estará al cargo de todas nuestras operaciones de baloncesto y ahora queda encontrar un general manager que trabaje junto a Earvin y al entrenador, Luke Walton", ha agregado.

"Un sueño"

Magic Johnson, por su parte, ha destacado que es "un sueño volver a los Lakers como presidente de operaciones de baloncesto y trabajar con Jeanie Buss y la familia Buss", remarcando que hará "todo lo posible por construir una franquicia ganadora dentro y fuera de la cancha". "Soy un 'Laker' desde 1979 y estoy enamorado de esta organización. Tenemos un gran entrenador como Luke Walton, y jugadores jóvenes y muy buenos, por lo que trabajaremos incansablemente para devolver a nuestros Lakers al campeonato de la NBA", ha subrayado.

Elegido como número 1 del draft de 1979, Earvin 'Magic' Johnson, permaneció en los Lakers hasta 1991, año en el que conmocionó al mundo anunciado que era portador del virus del sida, motivo que provocó su retirada. Formó parte del 'Dream Team' que logró el oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92. Regresó en la temporada 1995-1996 para disputar los que fueron sus 32 últimos partidos con los Lakers. Cinco veces campeón de la NBA y elegido en tres ocasiones como MVP, mantuvo una legendaria rivalidad con Larry Bird, líder de los Boston Celtics con los que los Lakers se disputaron la hegemonía en los ochenta.