Los 'Angry bird' animarán a Finlandia

Finlandia fue una de las cuatro invitadas de la organización junto a Brasil, Grecia y Turquía, rompiendo todas las normas no escritas que respondían a la clasificación en la lista FIBA o a la no inclusión de tres selecciones del mismo continente entre las 'wild cards'.

El equipo nórdico no es una potencia europea. Un país de escasa tradición en el deporte de la canasta, discretas participaciones en torneos internacionales (su mejor puesto es un sexto en el Europeo de 1967) y que ocupa la posición 39 en la lista de la FIBA (la 16 en el Viejo Continente), no es precisamente uno de los favoritos para participar en el gran campeonato planetario del baloncesto. Sin embargo, superó a históricos como Italia, Rusia, Alemania o China para poder estar en España. Estas cuatro son bajas de mucho peso. De hecho, el mismo Juan Antonio Orenga considera que el gigante asiático, un fijo en Mundiales y Juegos Olímpicos, era el gran ausente del torneo.

Pero ninguno de los rivales contaba con el apoyo de unos pajaritos enfadados de colores con muy mala uva que se dedican a acabar con los cerdos verdes que robaron sus huevos. Porque los 'Angry Birds' son finlandeses, más concretamente Rovio, la compañía desarrolladora de uno de los juegos para dispositivos móviles más conocidos y vendidos de la historia y que se ha convertido en una franquicia que se ha extendido más allá del propio juego.

Y fue Rovio una de las causantes de que los dirigentes de la FIBA se decidieran por la selección que desconcertó a todos en el último Eurobasket con importantes victorias ante adversarios de primer nivel, aunque acabó finalmente en la novena posición. Poco antes de que el máximo organismo del baloncesto mundial tomara la decisión, la empresa de entretenimiento desveló que apoyaría en lo que fuera necesario a su equipo nacional para que pudiera disputar su primer Mundial y se mostró dispuesto a colaborar 'publicitariamente' con el evento su así fuera. De hecho, se comentó que su apoyo económico fue sustancial dentro de la donación aportada por la federación finlandesa durante el proceso, otro de los puntos clave en la elección final. Italia o Rusia acabaron retirando sus candidaturas por no estar de acuerdo con el sistema de elección. De hecho, el presidente de la federación transalpina llegó a denunciar que era necesario un donativo de más de 800.000 euros para poder optar a unas de las plazas (Catar llegó a ofrecer más de un millón y medio, pero fue descartada). China alegó que no podía acudir a la cita con una plantilla suficientemente competitiva como principal causa para abandonar la puja.

Polémicas aparte, Finlandia contaba con un aliciente que resultaba muy jugoso para aquella sede que la acogiera: una espectacular masa de aficionados. Pese a que los objetivos deportivos no pueden ser demasiado optimistas, la manada de lobos no estará sola y contará con la hinchada más numerosa tras la española. Cuando la estrella Petteri Koponen, el NBA Erik Murphy o el veterano Hanno Möttölä salten a la cancha del Bizkaia Arena de Baracaldo para enfrentarse en la primera jornada a Estados Unidos, sentirán el apoyo de los más de 7.000 aficionados finlandeses que han viajado con entrada (otros 3.000 lo han hecho sin ella) para apoyar el histórico debut de su equipo nacional en un Mundial.