Anthony Randolph abandona el Real Madrid tras siete temporadas

Nacido hace casi 34 años en la localidad alemana de Wurzburgo, la cuna de Dirk Nowitzki, donde sus padres, ambos militares, estaban destinados, y elegido por los Golden State Warriors en la posición 14 del 'draft' de 2008, Anthony Randolph llegó al Real Madrid en el verano de 2016 procedente del Lokomotiv Kuban ruso, donde había despuntado como una de las figuras en alza de la Euroliga.

Su físico, versatilidad y lanzamiento exterior le habían convertido en una pieza codiciada dentro del mercado europeo, pese a que en su día no había logrado encontrar su sitio en la NBA tras pasar por las filas de Golden State Warriors, New York Knicks, Minnesota Timberwolves y Denver Nuggets.

El estadounidense se aclimató bien al baloncesto español y fue una pieza importante dentro de los esquemas de Pablo Laso durante sus primeras campañas en la capital española. Sin embargo, dos gravísimas lesiones mermaron su rendimiento en las últimas temporadas, lo que ha acabado precipitando su salida del Real Madrid mientras sobrevuela la posibilidad de una retirada.

En diciembre de 2020 se rompió el tendón de Aquiles en un partido de Euroliga disputado en El Pireo ante Olympiacos, lesión que le mantuvo casi un año de baja. Y en la campaña posterior se rompió el ligamento cruzado en el primer partido de la final de la Liga Endesa, disputado ante el Barcelona en el Palau Blaugrana. Volvió a las pistas en marzo del presente año, tras permanecer casi nueve meses de baja, pero ya con un papel residual en los planes de Chus Mateo. En la semifinal de la Euroliga ante el Barça disputó menos de siete minutos y en la final contra Olympiacos solo estuvo cinco minutos sobre la cancha.

La de Anthony Randolph es la cuarta baja confirmada del conjunto blanco para el curso venidero, después de que en los últimos días se oficializasen las salidas de Adam Hanga, Petr Cornelie y Nigel Williams-Goss.