EFE
Miércoles, 4 de junio 2014, 00:55
El Herbalife Gran Canaria se irá de vacaciones al perder ante el Unicaja (79-60), en el último encuentro de los cuartos de final, donde aguantó dos cuartos y el cansancio por las escasas rotaciones le derrotó ante un equipo malagueño certero y preciso.
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El ... encuentro empezó con quince minutos de retraso por la rotura del aro de la canasta en la que calentaba el Unicaja. Esto no influyó en los dos equipos, que iniciaron el enfrentamiento sin tapujos, con juego intenso, sin guardarse nada.
La igualdad fue predominante con alternativas de uno y otro equipo, aunque quizás se le veía algo más entero al Unicaja, con más fluidez y con un punto superior en el rebote. El Herbalife Gran Canaria aguantaba, a pesar de las dos faltas de su mejor jugador, el base Tomás Bellas, y la escasa aportación del pívot Samuel Tavares. El Unicaja salió tras el descanso de una manera fulgurante, sorprendiendo al Herbalife, que intentó basar su juego en el lanzamiento exterior, demasiado precipitado. El Herbalife Gran Canaria estaba exhausto, no podía más, solo cinco puntos en seis minutos. El partido estaba finiquitado por parte del Unicaja, que disputará después de cuatro años la semifinal el viernes ante el Madrid.
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