Tan joven y tan viejo

Sin embargo, a los 68 años y después de más de cuatro décadas en los banquillos y mil partidos en la ACB, el técnico madrileño ha liderado desde la banda al equipo revelación de la Liga y al más imberbe de la competición, con siete jugadores por debajo de los 22 años.

Con un brillante currículo que incluye nueve títulos ligueros, cinco copas, otros cinco campeonatos europeos variados (eso sí, con la espina de las tres finales de Euroliga perdidas con el Barça) o una plata olímpica, Aíto podría estar ya disfrutando de su tiempo de descanso tras una larga y próspera carrera. Pero el baloncesto es su vida y mantiene la ilusión de un recién llegado con proyectos tan atractivos y arriesgados como el del club sevillano.

Cuando asumió el pasado verano el reto de coger una plantilla tan repleta de talento como inexperta (Satoransky, Porzingis, Burjanadze, Balvin, Franch, Hernangómez, Sastre) en una competición tan complicada como la ACB, el objetivo de la permanencia parecía harto difícil de alcanzar, más aún tras el complicado comienzo de la fase regular. No sólo se llegó a la ambiciosa meta con uno de los estilos de juego más atractivos de la competición, además se obtuvo una meritoria séptima plaza que daba acceso a los playoffs por el título. Su camino se ha acabado en primera ronda, pero han hecho temblar los cimientos del contundente y poderoso Valencia, al que han obligado a pelear hasta el último segundo del tercer partido del cruce de cuartos para alcanzar las semifinales.

No es noticia ya que Aíto se atreva a dar la alternativa y la responsabilidad a jugadores novatos sin importarle los peligros y consecuencias de su apuesta. Así, de su mano, han podido reivindicarse zagales que luego le acabaron por dar la razón con su progresión como Juan Carlos Navarro, Pau Gasol, Rudy Fernández o Ricky Rubio.

Lo que chirría realmente es que sea uno de los técnicos más laureados del baloncesto español y uno de los más veteranos, y no otros, el osado que se ha decidido a convertirse en el guía espiritual e intelectual del proyecto más valiente de una ACB necesitada de ideas frescas y renovadoras como las del Cajasol. Así es Aito. Como cantaba Sabina, tan joven y tan viejo, like a Rolling Stone.