Mismos errores e idéntico castigo

Los diez primeros minutos no difirieron de lo que viene haciendo el cuadro capitalino en los últimos encuentros. El Clavijo es capaz de competir y hasta de mandar sobre la cancha, sea el rival que sea. El 25-21 del primer parcial era la muestra de un choque divertido e igualado.

Pero el cambio se produjo en el segundo cuarto. Otra vez. Parcial de 14-2 del Betis en apenas cuatro minutos. Demoledor y 39-24 en el marcador. Volvieron a encontrar el aro rival los riojanos y fueron limando la diferencia hasta un esperanzador 50-44 al descanso.

Pero tanto estirar la goma desgasta y el Clavijo sufre mucho en esos minutos en los que no anota. Ylos rivales lo aprovechan sin compasión para castigarle. El Real Betis, un Betis mucho mejor y mucho más sólido que aquel en problemas de la primera vuelta, lo hizo.

Se escapó de nuevo el conjunto local (67-51) con jugadores del talento del dominicano Eddy Polanco y de Joaquín Rodríguez, dos jugadores para disfrutarlos, sobre todo cuando juegan con el marcador a favor. Más todavía ante una defensa demasiado permisiva si se tiene por objetivo la remontada.

El Rioverde trataba de seguir pese a todo aferrado al partido, con un inmaculado Tamba en sus lanzamientos y a base de un arma con la que no había contado hasta ahora:el lanzamiento triple. Los de José Luis Pichel (de nuevo en el banquillo por la sanción del club a Jenaro Díaz) tuvieron un más que brillante porcentaje de catorce aciertos de veintisiete intentos que, sin embargo, acabó por no servir para nada.

Ahora bien, es innegable que, con sus defectos, carencias y problemas, el Clavijo mantiene al menos un loable espíritu de lucha. Es de agradecer que no se deje llevar cuando el partido está prácticamente decantado a favor del rival y siga intentando acabar lo más dignamente posible. Ante el Betis fue una nueva demostración de ello.

Pese a que los verdiblancos no dejaban que la distancia bajara de las dos cifras, los logroñeses, con un triple de Knudsen (90-82), aún obligaron al técnico local a solicitar un tiempo muerto para recordar a los suyos que todavía quedaba un minuto y medio para irse a descansar.

El Real Betis se acerca un poco más al 'play off' de ascenso y el Rioverde Clavijo mira ya desde la orilla el odiado descenso de categoría.