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Julián Martínez suma su segunda victoria al mando del Campus Promete. Si hace ahora dos años, ante el mismo rival, la derrota les acercó al abismo, en esta ocasión el triunfo puede saber a gloria. Queda mucho aún por jugarse en la Liga Femenina ... Endesa, pero es indudable que ganar a Bembibre este sábado (57-49) vale su peso en oro.
No fue, como en Tenerife, un encuentro de ritmo y desparpajo. El de este sábado en Lobete hubo que masticarlo poco a poco, como un trozo de corteza, hasta que pudo deshacerse. Fue Dongue, en los últimos minutos, la que sacó la casta necesaria para ganar la batalla, con un par de robos y seis puntos en el momento crucial. Pero antes la protagonista había sido Roselis Silva, brillando en defensa y dando velocidad al partido. Faltó Gidden e Ivanovic fue de menos a más, pero lo importante es que el triunfo ya luce en el casillero del Promete. Defensa y actitud fueron la clave ante un Bembibre que va a dar mucha guerra en su lucha por la permanencia gracias a la reincorporada Gladkova.
Dominaron las riojanas en el tanteador durante los veinte primeros minutos, pero sin poder romper el choque. Lo tuvieron muy cerca en el segundo cuarto, cuando un triple de Silva colocaba a las de Julián Martínez con diez puntos de ventaja (21-11, m. 13). Pero ahí llegaron los problemas de las riojanas, bien en defensas comandadas por las venezolanas pero con poca mordiente y, sobre todo, escasa aportación de sus dos puntales: Dongue y Gidden. Era Ivanovic la que tiraba del carro mientras que la pívot jamaicana lograba sus dos primeros y únicos tantos de esos veinte minutos con una canasta que llevaba a las jugadoras a vestuarios (25-21). Hasta ese momento, Bembibre había demostrado ser un conjunto rocoso y dependiente de Gladkova, que aportó 9 de los 21 puntos de su equipo en esa primera mitad.
Necesitaba el Promete subir el nivel de exigencia del encuentro, acelerar el ritmo y obligar a correr a Bembibre si quería evitar los problemas ante un adversario relativamente cómodo en un partido enfangado y lento. Y no lo logró en el tercer parcial. Incluso las bercianas lograron ponerse por primera vez por delante en el marcador (27-30, m. 22), aunque la ilusión no les duró mucho. Dos triples de Estebas y Mosqueda Lewis en tres minutos de juego volvieron a reordenar el encuentro (33-30, m. 26). Pero el partido parecía ya sólo un ejercicio de defensas. Dongue por fin hacía valer su calidad y fuerza para encadenar un par de buenas acciones y poner el 39-34 a falta de diez minutos.
Una vez comprobado que el duelo no se iba a decantar por ninguna racha, debido a la falta de acierto de cara al aro y a la densidad defensiva, tocaba sufrir y salir a morder. Fue desde el exterior, con sendos triples de Mosqueda Lewis e Ivanovic, a falta de cuatro minutos, cuando el Promete creyó que lo tenía hecho, pero volvió a aparecer Gladkova, la estrella de las bercianas para sembrar la incertidumbre.
Julián Martínez se desesperaba por acciones de sus jugadoras hasta que apareció Dongue y despejó las dudas. Primero, una canasta de las suyas y después, un robo y una bandeja jaleada por Lobete ponían el triunfo en bandeja por fin (53-46, m. 39) para las jugadoras del Promete.
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