Carrera Valle del Iregua
García Ramón y Casas vuelan sobre el Iregua

Más de 300 atletas tomaron parte en una prueba que hizo buenos los pronósticos

César Álvarez

Logroño

Domingo, 14 de abril 2024 | Actualizado 15/04/2024 07:50h.

Todo apuntaba a que algo raro tenía que ocurrir para que Nacho García Ramón no se impusiera en la décima edición de la Carrera Valle del Iregua. Y no ocurrió. El alfareño tomó el mando desde el inicio de la carrera y no lo cedió en ningún momento. A lo largo de los once kilómetros fue abandonando a sus compañeros de grupo (que ya dejó reducidos a tres cuando aún no se había salido del casco urbano de Villamediana) y con un ritmo fuerte se presentó en solitario en la línea de meta.

En féminas, con una inscripción mucho más reducida, el resultado era mucho más incierto. No había una favorita clara y por eso, el triunfo cómodo de Martina Casas no se puede calificar de sorpresa, aunque su dominio de la carrera también fue bastante claro.

La prueba ya había comenzado con éxito. En la línea de salida se dieron cita 322 atletas (una cifra muy superior a la de las últimas ediciones)de todas las edades. La mayoría lo hizo para estrenar la carrera de tres kilómetros que concluyó en Alberite y que constituyó una auténtica fiesta del deporte más familiar.

Aunque hubo padres que se apuntaron con sus hijos para afrontar juntos los 3.000 metros que separan Villamediana de Alberite, sólo algunos –unos pocos– cumplieron su objetivo.

En cuanto se dio el pistoletazo de salida, los hijos abandonaron a sus progenitores y comenzaron a correr sin controlar mucho los ritmos ni dosificar las fuerzas. La juventud es muy impetuosa, y aunque en algunos casos acusaron el esfuerzo, en otros llegaron a cruzar por debajo del arco situado en Alberite totalmente frescos.

Casi tanto como el alfareño García Ramón cuando se proclamó vencedor de la prueba, aunque después de ganar afirmó con humildad que «ninguna victoria es fácil».

Lo cierto es que él, siempre se mantuvo en cabeza de carrera. En los primeros metros impuso un ritmo casi de sprint por las calles de Villamediana que hizo la primera criba. Al abandonar el casco urbano sólo Iván Ganzábal seguía a su lado, mientras Juan Carrascal ya 'hacía la goma' para tratar de no perder comba desde el inicio.

Por detrás se organizó un grupito en el que figuraban inicialmente Carlos Velilla, Guillermo García, Javier Ochoa...y un tercero encabezado por Santiago Peso, Diego Marín y Javi Rodríguez.

En féminas, inicialmente la cabeza de carrera fue para María Ochoa mientras que por detrás, a cierta distancia le seguía Martína Casas, y aún más lejos, Sonia Pérez, pero así como en la prueba masculina hubo pocos cambios, sí que variaron las posiciones en la carrera femenina.

Martina Casas asumió el mando pasado el ecuador de la carrera, de forma que cuando ya estaba Albelda a la vista, fue ella quien iba en una cómoda primera posición. María Ochoa se consiguió mantener en segundo lugar, pero también hubo cambios por detrás, en el tercer puesto que acabó siendo para la veterana riojana más ilustre: Maru Hernáiz, una fija en la carrera.

En chicos, Iván Ganzábal –que fue quien más aguantó el frenético ritmo de García Ramón se adjudicó la segunda plaza, mientras el tercer lugar fue para Juan Carrascal que aguantó en una posición intermedia y corrió la mayor parte de la carrera en solitario, bajo un sol –que en el último tramo, cuando ya había avanzado el reloj y se aproximaba el desenlace de la prueba– castigó a los corredores.

Javier Ochoa, Guillermo García o –el atleta albeldense– Carlos Velilla se quedaron cerca, pero nunca tuvieron opciones reales de subirse al podio.