La parrilla como seña de identidad

Óscar Palacios Palacios lleva más de veinte años detrás de las brasas. Después de una larga e intensa experiencia trabajando en una sidrería navarra, este riojano quiso retornar a su comunidad natal para fundar un negocio donde la parrilla pasaría a convertirse en el epicentro de todo.

Hace apenas tres meses, Óscar decidió lanzarse a la piscina abriendo una sidrería en Albelda, una localidad que no cuenta con ningún otro negocio con este tipo de oferta gastronómica. «Buscamos ser diferentes ofreciendo una experiencia única para todos mis clientes y gente conocida», explica Óscar.

Su punto fuerte son las carnes y pescados a la brasa que se cocinan de cara al público gracias a las parrillas ubicadas dentro del comedor de la sidrería. «Para mi era my importante que mis clientes pudieran ver con sus propios ojos cómo tratamos el producto. Enseñamos la carne o el pescado, lo asamos en la parrilla y lo cortamos todo de cara al comensal», relata el propietario de la Sidrería Palacios.

Además del comedor, donde se sirven los productos a la brasa, este local también oferta un menú del día que puede degustarse tanto dentro del establecimiento como en su amplia terraza exterior en la que puede dar de comer a casi un centenar de personas. «Sin duda la terraza se ha convertido en uno de nuestros mejores tesoros», asegura Óscar.

Y es que, con la llegada del buen tiempo a la gente le apetece comer fuera pudiendo disfrutar de las inmejorables vistas al Valle del Iregua, que pueden observarse gracias a la disposición del local, junto a una chuleta a la brasa o un pescado a la parrilla», comenta con orgullo el propietario. Todo ello maridado con una de las mejores sidras del mercado, la gipuzcoana Altzueta. «Es una sidra espectacular que ha recibido por dos años consecutivos el premio a la mejor de toda Guipúzcoa. Es una bebida rica en el paladar, sin ese punto de acidez que permite que pueda beberse fácilmente», relata el dueño de la sidrería.

Su terraza recorre toda la cristalera del local permitiendo que la Sidrería Palacios pueda dar servicio a unas 95 personas durante las comidas y las cenas. Cuenta con unos toldos con los que proteger a los comensales del sol durante las horas más calidad del día así como una perfecta y acogedora iluminación para las noches de verano.

Pese a los tres meses de rodaje, Óscar Palacios comenta estar muy satisfecho con la acogida de su sidrería confiando en que durante la época estival todo aquel «que no nos conozca se acerque a Albelda para disfrutar de nuestras brasas y terraza».

• Temas
• Hostelería