Nueve mundiales y eurocopas

Y Chuchi, siempre, detrás de la barra, que completa nueve mundiales y otras tantas Eurocopas sumando la que comenzó ayer en Francia. Se situó tras la barra de El Junco en 1982, y desde entonces no ha dejado de hacerlo, ya sin su recordado y añorado socio y amigo Jesús, que le acompañó en esta aventura que ha marcado sus vidas. El Junco forma parte de la historia de Logroño en una calle muy particular del centro.

«Es curioso. Después de tantos años, con tantos cambios en todos los aspectos, en esta calle se mantiene la rutina de que cada cuadrilla va al mismo bar, a su bar. No se va de ronda. Se va a un bar en concreto. Es algo que pasa solo en esta calle», explica Chuchi. Así que El Junco cuenta con sus fieles. De toda la vida. Garantía de que las cosas se han hecho siempre bien. Desde el inicio. El Junco ocupó el espacio de una antigua granja de pollos y ahora, como desde 1982, sirve buen café, buenas cervezas, refrescantes zumos, copas perfectamente servidas... El Junco, sello de la identidad de una calle, con Chuchi tras la barra.