Algunos historiados sitúan la bebida surgida de la fermentación de la miel mezclada con agua como la primera bebida alcohólica de la historia. Parece ser que las civilizaciones griegas y romanas, entre otras, habían adoptado su consumo entre sus costumbres.
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Ahora, los hermanos Echapresto en su 'asentamiento' de Daroca de Rioja han puesto en marcha un nuevo proyecto para la elaboración artesanal de esta bebida a partir de la miel natural que ellos mismos obtienen de sus colmenas, o de la miel de brezo, calluna y roble que compran a apicultores de la zona de Moncalvillo o mieles de almendro, romero y tomillo que compran a productores de la Sierra de Yerga.
La idea surgió de un encuentro con varias personas entre las que se encontraba Sergio Sáenz, un ingeniero agrónomo, enólogo, apicultor y productor de hidromieles desde 2014 que animó a los dos hermanos para poner en marcha un proyecto que empezó a fraguarse en 2017 y que, después de sumar al joven Ismael Echapresto, ahora ve la luz como 'Moncalvillo Meadery'.
Desde que comenzaron a experimentar, los hermanos Echapresto han puesto su foco en crear hidromieles de alto valor gastronómico que puedan complementar la oferta gastronómica que proponen en su restaurante Venta de Moncalvillo y que ha merecido una estrella en la Guía Michelin. Para ellos, abarcan desde las elaboraciones más secas (similares a vinos blancos), a las semidulces y las dulces. Todas ellas –en un proceso que guarda ciertas similitudes con el vino– se envejecen en barricas de roble y son maduradas posteriormente en botellas.
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