Desembarco en Formentera

Entre ellos, dos pesos pesados de la cocina catalana, Nandu Jubany, con Can Carlitos, en La Savina, junto al puerto donde atracan los ferrys de Ibiza, y Carles Abellán, con Casa Natalia, en la localidad de Sant Ferran. El caso de Abellán es aún más especial ya que ha fijado su residencia en la isla junto a Natalia Juan, su mujer. Tras unos años en El Bulli abrió Comerç 24, donde llegó a tener una estrella, aunque lo cerró más tarde. Pero el que le ha hecho más conocido es Tapas 24, donde rinde homenaje al mejor tapeo de los bares de Barcelona con una oferta de máxima calidad. Como muestra, su ensaladilla fue la ganadora del primer concurso nacional organizado en Gastronómika en 2018. Repitió triunfo en el congreso donostiarra, en este caso el pasado año en el campeonato de garbanzos Tierra de Sabor con una tapa que unía la legumbre con raya y salsa de callos a la madrileña.

En Casa Natalia, Abellán insiste en la fórmula de Barcelona con una oferta de cocina mediterránea pensada para compartir y que gira siempre sobre la sencillez de las elaboraciones y la máxima calidad del producto. Espectacular chuletón de atún rojo, carpaccio de vaca rubia gallega, picanha especiada, brioche de pastrami, hinojo a la brasa, berenjena con sobrasada de Xesc Reina, calamar de la isla con cebolla confitada o lasaña de fricandó son algunas de sus atractivas propuestas. Muy similar es la oferta de Nandu Jubany en Can Carlitos, con una destacada presencia de las tapas, aunque en este caso comparten protagonismo con los arroces, hasta siete en la carta.

A estos dos restaurantes añadan, si visitan la isla, Fandango, en Es Pujols, muy centrado en los pescados de la isla y en un precioso emplazamiento junto al mar. Como precioso es el lugar que ocupa Es Caló, una casa de cocina tradicional de Formentera donde hacen muy bien el tradicional bullit de pescado y donde, con reserva, pueden probar el popular frito de langosta.