The Way, conservas y vermús en el mercado

Tradicionalmente las plazas de abastos han sido el epicentro de la compra y venta de productos perecederos de proximidad. Con el paso de los años, estos céntricos lugares han permitido albergar diferentes locales con los que el cliente podía ampliar su experiencia gastronómica. Y es que, además de llenar la cesta de la compra, el consumidor podía degustar dichos productos junto a un vino o un vermú. Esto es lo que ocurre a día de hoy en el Mercado de Calahorra gracias al bar de 'street food' The Way. Un establecimiento que se hace un hueco entre las carnicerías y pescaderías calagurritanas para ofertar una amplia carta de platos fríos y calientes de jueves a domingo.

Esta aventura comenzó en 2019, cuando el Ayuntamiento de Calahorra ofreció a Diego Casa, propietario de The Way, un local que había sido durante años una pescadería. «Nosotros veníamos de trabajar en 'foodtrucks'. Estuvimos dando vueltas a la idea de abrir un establecimiento físico durante un tiempo hasta que decidimos tirarnos a la piscina montando un local moderno en formato de vermutería», explica su dueño.

Su amplia gama de referencias de cervezas, vinos y sobre todo vermús maridan a la perfección con su oferta de elaboraciones calientes y frías. En el bar de 'street food' The Way el cliente podrá degustar desde las versiones más desenfadadas de los clásicos 'hot dogs' o montaditos, como el de butifarra con habas, hasta una amplia oferta de conservas de alta calidad. «Pese a tener la posibilidad de dar platos calientes hemos decidido centrarnos en el mundo de las latas. Tenemos berberechos y otras conservas traídas desde Portugal o Finlandia, anchoas de Santoña, mejillones, atún, caballa, navajas...», enumera Diego Casa.

Este novedoso establecimiento lleva más de tres años de rodaje, pandemia de por medio. Tal y cómo rememora su dueño, «los primeros meses fueron increíbles pero llegó el COVID para paralizarlo todo. Fue una etapa muy dura en la que tuvimos que echar la verja pensando que tan solo iban a ser quince días de cierre. Lo que no nos imaginábamos es que, después de la gran inversión que hicimos, tuviéramos que estar tanto tiempo parados». Afortunadamente este momento ya pasó permitiendo que la hostelería volviera a la normalidad.

The Way se ha convertido en uno de los puntos neurálgicos de Calahorra y su plaza de abastos. La historia que habita dentro de las paredes del mercado empastan a la perfección con la modernidad de un local que busca «ser algo vanguardista y que rompa con todo lo demás». Una oferta diferente y divertida que ha pasado a convertirse en una parada obligatoria de autóctonos y foráneos. Aún con todo, Diego Casa quiere animar a todos esos calagurritanos que no conocen The Way a que «se atrevan y venga a disfrutar con nosotros».

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