Autol y champiñón, una relación que apunta a finales de los años 50

Aunque no hay ningún documento que lo certifique exactamente, todo apunta a que la relación de Autol con el cultivo de champiñón comienza a finales de los años 50 del pasado siglo.

En esa fecha, se puso en funcionamiento la cooperativa vinícola de la localidad riojabajeña –que dio lugar, posterirmente, a bodegas Marqués de Reinosa– y las pequeñas bodegas, casi exclusivamente unos calados para elaboración doméstica para el propio consumo, se iban quedando vacías. Esas cavas o calados fueron alquiladas por cultivadores de champiñón que procedían de otros lugares y contrataban a algunos autoleños para que les ayudaran en las labores con el champiñón.

Los autoleños fueron aprendiendo y el cultivo de champiñón se fue convirtiendo en una alternativa a la elaboración de vino. Las pequeñas bodegas familiares que se iban quedando sin uso eran aprovechadas para el cultivo de un producto que se vendía bien porque no era habitual en la zona y que servía para elevar la renta agrario de unas economías casi de subsistencia, como eran la mayoría de las de la zona, todas de carácter agrícola y rural.