Secciones
Servicios
Destacamos
Isabel Virumbrales
Sábado, 27 de mayo 2023
Ni un suspiro tardó el presidente en cambiar el tercio del primer toro de la tarde. Fue un visto y no visto que no dio tiempo a Urdiales nada más que a firmar un lance a un toro abanto de salida, lo habitual en los ... astados del hierro de El Pilar. El toro era un tío que no andaba sobrado de fuerza. Diego Urdiales lo dejó colocado en el caballo donde no se empleó. La fiesta vino cuando Urdiales bordó el toreo con el capote. Diego compuso la figura y recetó al astado cuatro verónicas y una media rematada en la cadera. Pero qué verónicas, qué despacio y qué toreo de mano baja al ralentí cargando la suerte. ¡Qué obra de arte! Aguado quiso la réplica y también apostó por verónicas. La cosa no acabó ahí. Urdiales quiso ejercer la contrarréplica y se dejó llevar. El capote del riojano voló con suavidad para firmar otro ramillete de lances profundos. En el tercio de muleta Diego armó la faena sobre la mano diestra. Era imposible la ligazón y cada pase fue un logro. Se justificó al natural y el de Moisés Fraile no puso nada de su parte. Dejó el estoque arriba con facilidad y recogió una ovación en el tercio.
Pablo Aguado encadenó un rosario de verónicas para recibir al segundo de la tarde. Después hizo un quite, también por verónicas, colosal. Una de ellas a cámara lenta. Fueron replicadas por Francisco de Manuel. Aguado cogió la pañosa y se llevó al toro a los medios en un inicio de faena repleto de suavidad. El animal humillaba pero su fuerza estaba minada y se agotó pronto. Se perfiló en la suerte contraria. Colocó media estocada. Salió a saludar al tercio.
Francisco de Manuel paró de capote al tercero, al tercero bis y al tercero tris del hierro de Conde de Mayalde al que recibió con una larga de rodillas en el tercio. Estuvo variado con el capote y su baza fue la actitud. Se puso de rodillas para comenzar la faena y el Mayalde, que tenía una embestida muy informal, se lo echó a los lomos. Tiró de arrojo, estuvo firme ante un ejemplar que apretaba hacia las tablas. Lo pasaportó de una gran estocada. Hubo petición de oreja que se quedó en vuelta al ruedo.
La segunda parte del festejo fue cuesta arriba. El cuarto de la tarde fue un toro largo que Urdiales brindó al público en el mismísimo platillo. Se escuchó alguna voz desde el tendido que pedía al riojano que abreviase. Este pidió paciencia y mostró sus cartas cruzándose al pitón contrario. El burel careció de raza y de clase, no tuvo nada. Por el pitón izquierdo, más de lo mismo o incluso peor. Diego tuvo que esperarle más a sabiendas de que era imposible el lucimiento. Colocó media estocada y, en esta ocasión, su labor resultó silenciada por la plaza de Madrid.
El que hizo quinto salió al ruedo defendiéndose. Aguado lo intentó ante un ejemplar que no ofrecía ninguna opción. El sexto tampoco fue para volverse loco. Francisco de Manuel firmó un bonito galleo por chicuelinas, brindó al público y planteó la faena a media altura y pareció que el toro se venía arriba. Tuvo dos series que aprovechó. Marró con la tizona y escuchó dos avisos.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.