«No hemos modificado ni un ápice la costumbre con el 'prime time'»

Tiene claro el nuevo presidente que RTVE debe «contribuir a la democracia, la educación, la cultura y la información de calidad». En este sentido que el nombramiento haya recibido los diez votos positivos del consejo de administración supone un hito importante «porque ha creado un espíritu que rompe con la idea de que era imposible conseguir acuerdos. Los miembros del consejo de administración tienen capacidad de entendimiento y están trabajando por RTVE», garantiza. De hecho, espera que la independencia de la Corporación no se ponga en duda. «A mí como presidente no me presiona nadie», afirma tajante al tiempo que enarbola un lema: «Sugerencias, sí; injerencias, no». «Sé que las televisiones públicas son objeto de disputa, pero creo que en España hemos dado un salto. Dependemos del Parlamento y no del Gobierno y esto obliga a asumir una filosofía diferente. Debemos ser fieles a la independencia periodística», sostiene.

No en vano, cuando asumió el cargo ya dejó claro que el llamado 'infoentretenimiento' no tenía cabida en su concepción de la televisión pública. Es así como espacios como 'Las cosas claras', de Jesús Cintora, han logrado eludir las restricciones legales que impiden la externalización de programas informativos. Ayer este veterano de la televisión pública profundizó en la idea de que el periodismo de calidad tiene que ser un valor de servicio público y sería «el que contrasta, el que se exige a sí mismo, el que es crítico y responsable, y el que no exacerba de cara al público ni los sentimientos ni las emociones. Es una mezcla entre vida y racionalidad. Tiene sus parámetros y unos protocolos que no se pueden perder y en esto vamos a profundizar y a seguir sin parar».

Durante estos primeros meses el presidente y su consejo de administración se han centrado en lo económico y lo estructural. Los cambios de parrilla, en cambio, no están definidos. «Sí sabemos que vamos a mantener una banda por la mañana, que tiene que ser reflejo de la vida, que tome el pulso a esta, pero no hay ninguna decisión tomada sobre contratación por parte del nuevo equipo», admite. Así las cosas, a partir de agosto y septiembre, «veremos los primeros gestos de esta programación», pero los cambios más profundos llegarán «sobre todo a partir de enero». Habrá, apunta, renovación de caras en las tertulias, «aunque no todas», y siempre buscando «un debate sosegado» y en contra de la «polarización constante».

Hubo espacio para tratar otros asuntos de calado. Quizá uno de los más significativos es el del 'prime time'. Pérez Tornero ya dijo en sede parlamentaria que con la decisión de adelantarlo RTVE había perdido audiencia. Ayer fue más específico aún: «Lo que sabemos es que no hemos modificado un ápice la costumbre de los españoles y, puesto que sabemos que lo imposible no se puede hacer, tenemos que movernos en otras circunstancias».

En este punto habló sobre la plataforma digital que RTVE está diseñando en estos momentos y que se lanzará en versión beta durante los Juegos Olímpicos de Tokio, aunque no estará consolidada hasta finales de año. A su juicio, va a permitir «destemporalizar los consumos». «Podremos utilizar múltiples ventanas para orquestar la difusión y que alguien no tenga que esperar para ver una serie, sin perjuicio de que quien quiera acabar de ver 'Masterchef' de madrugada pueda hacerlo sin problema». ¿Significa esto que volverá a retrasar el 'prime time'? «Si la gente ve más RTVE a partir de este minuto, pues para nosotros es importante estar ahí con el mejor producto. Y eso lo vamos a jugar fuerte», responde.

La plataforma además va a contribuir a uno de los grandes propósitos que el presidente de RTVE tiene en mente y es jugar un papel importante en el ámbito internacional, donde sí podría cobrar por prestar el servicio. «Somos el motor de la industria del cine, en buena parte, y por tanto el motor de la industria clásica de creación audiovisual. Podemos generar muchas alianzas a nivel internacional. Limitarnos a nuestras fronteras es condenarnos a la nada», asegura quien cree que en la creación de estos contenidos de ficción y entretenimiento RTVE «debe ser más proactiva y no una ventanilla donde vienen a vendernos cosas». No se queda ahí. Ayer anunció que este mismo viernes tiene una reunión con las radiotelevisiones públicas europeas «para hacer un lobby fuerte y exigir que las plataformas que tienen base fuera de nuestro país rindan a nuestros ciudadanos», en colaboración con la Comisión Europea y el Parlamento Europeo.

Otra de las cuestiones que trató fue la aparente dejadez de este último año en torno a Eurovisión. «Nos lo vamos a tomar muy en serio, primero porque es un programa que tiene éxito y segundo porque somos la única televisión pública que pertenece a la Unión Europea de Radiodifusión, somos socios y nos interesa su naturaleza europea y de contacto con la juventud». En cuanto a la posibilidad de que vuelva la tauromaquia a RTVE, tal y como recomendó el Parlamento a través de una Comisión Mixta, el presidente asegura que se va a estudiar «con amplitud de miras y diálogo con todas las partes».

Finalmente, avanza, además, una transformación «profunda, gradual y meditada» en la identidad corporativa.