No han aprendido nada. Ni Jordi Cruz, ni Samantha Vallejo-Nágera, ni Pepe Rodríguez. Solo así puede entenderse el fragmento de vídeo que se ha viralizado en el que Tamara, la consultora financiera de origen ruso afincada en Barcelona, anunciaba que abandonaba 'MasterChef' -o debería ... decir 'MasterBluff'- tras cinco entregas. «Hay momentos en los que me siento más y momentos en los que me siento menos cómoda por la situación y por la experiencia en general», explicaba la concursante a los tres. «Tengo claro que mis compañeros se lo merecen mucho más y no me veo en la final, así que me voy voluntariamente», decía.
«¿Te vas? ¿A estas horas? Cojo y me voy. ¿Por que?», preguntaba Pepe con sorpresa y algo irritado. «Porque no me siento a gusto, Pepe. Tampoco estoy dando todo lo que me gustaría y constantemente estoy nerviosa. Hay tensión, presión, sé que es un programa, pero al final todos tomamos una decisión y yo quiero tomar esta», respondía Tamara.
En ese momento, entraba en acción Jordi. «No, pero, ¿sabes lo que pasa? Que Pepe te está haciendo preguntas, pero yo por este motivo no te haría ninguna, solo te diría: 'Muy bien, chao'. Le has quitado la oportunidad a gente, claro que sí», le afeaba el cocinero. «Por supuesto -reconocía ella-, pero yo me siento muy frustrada y no me apetece seguir en la misma dinámica en la que no estoy bien. Perdonadme, pero es más importante estar bien yo que decepcionaros a vosotros. Con todo el cariño, ¿eh? Lo lamento muchísimo».
«Muy bien, chao. Su delantal, su puerta», le despedía Jordi, de muy malas maneras. Para un programa que ha estado en el punto de mira en varias ocasiones por poner a prueba la salud mental de sus concursantes en una cadena pública, esto debería ser la puntilla. Pero lo dudo.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.