«Lo grandioso de la vida es que es imprevisible»

-¿De dónde nació la idea de juntarse con sus compañeras?

-Esa surgió de horas y horas de hablar, comentar, y de hacer 'brainstorming' (tormenta de ideas). Se celebraban los cincuenta años de la salida del colegio y eso dio pie a que yo asistiese a una comida en la que viera el cambio tan impresionante que se había producido en nosotras.

-¿Y cómo fue ese viaje a Italia?

-Fui con una idea, pero la actualidad te la quita y te pone otra. ¿Cómo haces para combinar eso? Pues eso es el programa. Grabamos mucha cantidad, y los editores y guionistas se las han visto y deseado para poder realizar su trabajo. Nos explotó una historia tan potente que tuvimos que acoplarnos.

-¿Cómo es ahora su día a día?

-Vivimos cuatro personas, y soy la responsable de dar de comer, poner la mesa, lavar los platos, limpiar un poco la casa… y de cuidar de Scott. Y luego estarían los salvadores, que son los libros, la música y las series. También intento estar muy al tanto de lo que pasa. Tengo Kiosko y Más, que me da todo lo que quiera. Y después están los chats y las fiestas virtuales, que son muy divertidos.

-¿Está más reflexiva también?

-Yo decía que 'Gran Hermano' era un programa imprevisible, y que eso le hacía grandioso. Pues lo grandioso de la vida también es que es imprevisible. Este bichito, que ni podemos ver, nos ha trastocado a todos, y la imprevisibilidad va a seguir. Los concursantes de 'Gran Hermano' sabían que a la salida estaban sus familias, pero nosotros aquí nos vamos a encontrar cosas que no sabíamos que estaban así.

-¿Entiende ahora mejor a los concursantes del 'reality'?

-Claro, y lo hablo con ellos. A mí no me sorprende nada, porque sabía que era esto, pero la gente sí está sintiendo lo que es estar aislado sin poder salir, y están entendiendo muchas de las actitudes, enfados y gestos que se producían en 'Gran Hermano'.

-¿Qué le ha parecido la gestión y la actuación de los políticos?

-Son muchos, y yo no estoy dispuesta a generalizar. Creo que llegará el momento, cuando todo esto pase, de hacer que rindan cuentas los que lo tengan que hacer. En principio, a mí me parece que están haciendo lo que pueden.