Espectadores adultos

Esto fue algo que durante mucho tiempo benefició a Telecinco. Sus seguidores empezaban la mañana buscando su dial en el mando y ya se quedaban en su compañía durante todo el día. Comenzaban con Ana Rosa y se dejaban llevar por los sálvames y realitys que iba proponiendo la cadena. Esta era una fórmula de éxito y la razón por la que casi todos los formatos que estrenaban la emisora de Mediaset gozaban del favor del público. Contaba con espectadores fijos del canal y consumían todo lo que les ofrecía.

El problema -para Telecinco- ha llegado cuando esos asiduos han ido escapándose a Antena 3 y han variado sus hábitos. Ahora es allí donde pasan el día. A Ana Rosa todavía la respetan, pero en cuanto llega Arguiñano cambian de canal y ya no se mueven hasta que termina la telenovela turca, 'La Voz' o el programa de Joaquín. Antena 3 ha conseguido construir una parrilla en la que ese espectador adulto se encuentra a gusto y no necesita buscar más a lo largo de la jornada. Confía en que lo que allí emitan le va a satisfacer. Por eso ahora es esta cadena la que acaricia el éxito en cada estreno, sea del género que sea. El último ejemplo ha sido lo de Sonsoles, que ha debutado aprovechándose de este buen momento que vive Atresmedia.