Los Underwood contra el mundo en la quinta temporada de 'House of Cards'

En España, los 13 episodios de esta nueva temporada de la serie de Netflix podrán verse en exclusiva en Movistar+, que firmó el contrato antes del desembarco español de la plataforma norteamericana, y estarán disponibles a partir de mañana por la mañana, justo después de su estreno en EE UU.

La quinta temporada arranca donde se quedó la cuarta: con Claire nominada a la vicepresidencia junto a su marido y Frank declarando la guerra abierta a un grupo terrorista islámico llamado ICO. Una guerra "contra el terror" que parece más encaminada a distraer la atención sobre los cadáveres que él mismo ha dejado en su camino de ascenso al poder que a garantizar la seguridad ciudadana.

"El pueblo americano no sabe lo que le conviene. Yo sí", dice un tenebroso Frank Underwood en el tráiler. "Son como niños, tenemos que limpiarles las manos y la boca, tenemos que enseñarles a distinguir entre el bien y el mal, decirles qué pensar, como sentirse o qué quieren".

Además de Spacey y Wright, 'House of Cards' seguirá contando con la pareja de consejeros presidenciales Doug Stamper y LeAnn Harvey (Michael Kelly y Neve Campbell) y otras caras conocidas como las de Seth Grayson (Derek Cecil), Will y Hannah Conway (Joel Kinnaman y Dominique McElligott), Thomas Yates (Paul Sparks) o Catherine Durant (Jayne Atkinson).

Dos nuevos fichajes

A ellos se unen dos nuevos fichajes: Patricia Clarkson interpretando a Jane Davis y Mark Usher como Campbell Scott, dos personajes de alto nivel pero que evitan los focos y cuyas verdaderas motivaciones por el momento permanecen ocultas.

En esta temporada, buena parte de la acción llevará al exterior de la Casa Blanca, desde un electorado cada vez más enfadado, a un equipo de periodistas de investigación, encabezado por Tom Hammerschmidt (Boris McGiver) y Sean Jeffries (Korey Jackson), que pisan los talones a los Underwood.

Ganadora de seis Emmy y dos Globos de Oro, la serie ha cambiado de showrunners. Melissa Gibson y Frank Pugliese, productores desde la tercera temporada, toman el relevo a Beau Willimon, hasta ahora responsable de la adaptación, pero todo apunta a que se mantendrá el tono de culebrón de las últimas temporadas.