El baile de la vicepresidenta en El Hormiguero

Ha respondido algunas preguntas de la actualidad política y ha echado balones fuera en otras, al más puro estilo de su jefe, el presidente Mariano Rajoy, cuando realiza declaraciones ante una televisión de plasma. «Fue para dar explicaciones en un momento complicado. Algunas veces no piensas que las cosas pueden ser malinterpretadas, y te equivocas», respondió cuando el presentador preguntó sobre las comparecencias del líder de Partido Popular.

Se trata de la primera vez que un miembro del Gobierno visita el conocido plató de Antena 3, en el que se pretende dar una imagen más desenfadada de la habitual. Los populares Cristina Cifuentes, Esperanza Aguirre y Esteban González Pons, los socialistas Pedro Sánchez y José Bono o el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, han sido algunos de los políticos que han asistido al famoso 'talk show'.

«Rajoy es un tio divertido y bailongo», ha reconocido la vicepresidenta, que ha definido al líder del Ejecutivo como «música de los 80» cuando Motos le ha preguntado si alguna vez había salido de fiesta con él. Además ha destacado que en el PP hay «muchos Icetas», en referencia a una de las anécdotas más comentadas de la última campaña electoral catalana.

La vicepresidenta asegura no tener miedo de Ciudadanos y le ha dado un sutil y elegante 'palo' a Aznar tras sus últimas declaraciones. «Tiene una forma de ver las cosas que la respeto pero no la comparto», ha comentado tras el aviso del expresidente de que Ciudadanos puede arrebatarle electorado al PP.

«Tiene que ser una gozada gobernar con dinero»

Santamaría también ha querido responder sobre los casos de corrupción en los que se ha visto envuelto el PP en los últimos tiempo. «Al final todos estos casos duelen por igual, sean de mi partido o de otro. Algunos corruptos tienen mucha ideología y poca verguenza. La política es muy bonita; cuando ves que algunos la utilizan como un trampolín para otras cosas, duele»

Respecto a la retirada de pasaporte de Rodrigo Rato ha querido destacar que «la justicia es igual para todos» y ha advertido de que «la gente debe saber que pase el tiempo que sea desde que se comete un delito, al final acabará pagándolo».

En cuanto a las elecciones en Cataluña y los últimos acontecimientos en esta Comunidad, la vicepresidenta ha afirmado en cuanto a los independentistas que es muy difícil contentar «a quien sólo tiene un objetivo».

Sobre los objetivos y la realidad presupuestaria del país ha destacado que «tenemos que bajar los empleos. O al menos hacerlos mucho más fáciles para crear empleo. Tenemos que cambiar la financiación autonómica porque es la financiación del estado de bienestar, es la salud, es la educación, ¿sabes lo que tiene que ser una gozada? gobernar con dinero. A nosotros no nos ha tocado».