«El teatro ha unido y ha hecho más fuerte a Villoslada»

– ¿Por qué fundaron un grupo de teatro en Villoslada?

– La afición por el teatro viene de lejos en Villoslada. Aquí, como en muchos otros municipios de la sierra riojana, las 'comedias' constituían uno de los pocos momentos de ocio entre la actividad cotidiana. En el caso de La Colodra, surgió cuando quisimos realizar alguna actividad para recoger fondos solidarios en Navidad y Maxi, nuestro párroco entonces, nos animó a continuar y así surgió la primera 'Pasión' que estrenamos en 2012. Desde entonces nos dejamos llevar por nuestra pasión por el teatro y por dinamizar nuestro pueblo.

– Y casi es más meritorio que se mantenga, teniendo en cuenta la despoblación, ¿no?

– Esa es la clave de todo. La Colodra es el ejemplo de cómo la cultura puede ser un eje vertebrador de nuestras comunidades rurales y cómo, a través de ella, podemos transformarnos como personas y como colectivo. Nuestra vocación es tanto las artes escénicas como contribuir a que nuestro pueblo afronte el reto demográfico con la fuerza que tiene una sociedad cohesionada, y parte de ello lo conseguimos gracias al trabajo de todos los que formamos parte de la Colodra.

– El libro recoge la historia de La Colodra, que es lo que le hace significativo, ¿no es así?

– 'Colodras' es un libro que recoge tres aspectos distintos relacionados con nuestra compañía de teatro. Por un lado, se publican algunos de los guiones más significativos de nuestra andadura, y, por otro, se recorre a través de ellos nuestros diez años de intenso trabajo teatral y grupal. Y también hago una reflexión sobre el papel de la cultura en el mundo rural. Es un libro donde quedan reflejadas nuestras personas y aventuras, pero también con el que analizar el caso de La Colodra, por si puede servir a otros que comparten como nosotros la preocupación de cómo ayudar a nuestros pueblos a seguir vivos.

– ¿Es difícil hacer teatro en un pueblo, cualquier pueblo?

– En cuanto a romper con algunos tabúes o estereotipos, sí. Pero precisamente por eso es necesario, solamente así podremos cambiar cosas y superar esas connotaciones negativas que hasta hace poco dominaban con respecto a lo rural. Las gentes serranas poseen una gran sabiduría y una larga y rica tradición rebosa por sus poros, lo importante es que creamos en ello y lo digamos con orgullo. Por otra parte, en ocasiones el teatro sólo es la excusa para hacer otras cosas igual de creativas, participativas e importantes. En nuestro caso, la afición viene de lejos y eso facilita el camino.

– ¿El teatro ha activado a Villoslada de Cameros?

– Por supuesto. Y también lo ha unido y lo ha hecho más fuerte. Hemos reforzado lazos entre las personas, los que ya existían y los que estaban un poco desgastados. Hemos recuperado y hecho nuestra una parte importante de la tradición oral y de nuestro pasado pastoril. Y hemos creado una Semana Santa entorno a nuestro patrimonio cultural que se encuentra entre las citas obligadas en La Rioja. Todo ello junto a otros muchos objetivos cumplidos, ha transformado Villoslada y ha contribuido a estar más implicados en el futuro de nuestro municipio y de nuestra comunidad.

– ¿Cómo de importante es la Semana Santa para La Colodra?

– Además de las connotaciones religiosas, para nosotros es una semana de cultura. En la 'Semana de la Sarga' todo gira alrededor de esta magnífica y monumental obra de arte. Villoslada se mueve mucho estos días y la gente se implica. Hoy, después de diez años, somos uno de los puntos de interés en La Rioja, lo que nos llena de orgullo.

– El libro está lleno de parabienes hacia usted por parte de Luis Vicente Elías y el editor. ¿Le ruboriza o le enorgullece?

– Reconozco que un poco sonrojada sí estoy. Agradezco a Elías el prólogo, a Álvaro González el honor de ser la primera publicación de La Zamarra y el apoyo al Ayuntamiento y a todos los colodros que forman parte del proyecto.