Secciones
Servicios
Destacamos
EFE
Miércoles, 28 de noviembre 2018, 18:03
Un cuadro del pintor impresionista francés Pierre-Auguste Renoir (1841-1919) que iba a salir hoy a la venta en la casa de subastas vienesa Dorotheum ha sido robado por desconocidos, confirmaron este miércoles fuentes de la policía.
«De acuerdo con el estado actual ... de la investigación, tres hombres, actualmente desconocidos» y «aparentemente profesionales» robaron el lunes una pintura de Pierre-Auguste Renoir que estaba expuesta en el segundo piso del Dorotheum, ha explicado la Dirección de la Policía de Viena en un comunicado.
«Los hombres abandonaron el lugar por diversas salidas», prosigue la policía, que ha publicado las fotos de los presuntos ladrones ya que fueron filmados por las cámaras de vigilancia del edificio, situado en el centro de Viena. Doris Krumpl, portavoz del Dorotheum, ha confirmado a Efe que la obra robada es 'Golfe, mer, falaises mertes', firmada por Renoir en 1895, un paisaje en óleo de 27x40 centímetros tasado en entre 120.000 y 160.000 euros, y ha afirmado que este robo es completamente inusual.
El Dorotheum, que con cerca de 250.000 objetos vendidos al año es la mayor casa de subastas de Europa Central, «cuenta con amplias medidas de seguridad. Nuestras obras de arte están aseguradas y en las pasadas décadas ningún cuadro había sido robado», ha explicado Krumpl.
El cuadro sustraído formaba parte de la subasta de este miércoles titulada 'Clásicos del Modernismo', que se celebrará como estaba previsto tras eliminar el cuadro de Renoir de la lista de obras de la venta. Una subasta que incluye un segundo lienzo de Renoir, así como obras de Pablo Picasso, Henri Rousseau, Giorgio de Chirico, Marc Chagall, Fernando Botero, Emil Nolde, Henri Matisse, Gustav Klimt, Egon Schiele, Alred Kubin, Carl Moll y Roberto Sebastian Matta, entre otros.
Según la televisión pública austríaca ORF, en una de las grabaciones de las cámaras de seguridad se puede ver cómo un desconocido «descuelga una obra de la pared, se la sujeta bajo el brazo, abandona el edificio con toda calma y desaparece luego entre los transeúntes del centro de Viena».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.