Los mejores momentos de la gala de los Goya

En una ceremonia que volvió a olvidarse del reloj y se adentró en la madrugada más allá de los que estaba previsto, Rovira imprimió a su papel como maestro de ceremonias con tono distendido, cómico y cercano que dejó claro al poco de empezar cuando tuteó al ministro Jose Ignacio Wert llamándole Nacho o regalándole un coche a Penelope Cruz.

Otro de los momentos álgidos se vivió cuando el malagueño Antonio Banderas subió al escenario para recoger el Goya de Honor con el que se distingue el conjunto de su trayectoria. El actor pronunció un bonito discurso que acabó con una emocionante referencia a su hija, Stella del Carmen, con la que no ha podido compartir tantos momentos como a él le hubiese gustado debido a sus obligaciones profesionales.

Por su parte, el presidente de la Academia, Enrique González Macho, reivindicó una bajada del IVA cultural, y el cineasta manchego Pedro Almodóvar, encargado de entregar el galardón honorífico a Antonio Banderas, agredeció a todos los amigos del cine su presencia en el recinto, excluyendo al ministro Wert de dicha categoría.

Sentidos fueron también los agradecimientos de los ganadores en los apartados individuales, como una emocionada Nerea Barros, mejor actriz revelación por su papel en 'La isla mínima', Bárbara Lennie, mejor actriz por su interpretación en 'Magical girl', o Javier Gutiérrez, mejor actor por 'La isla mínima y quien tuvo unas palabras muy especiales para su compañero de reparto en la cinta de Alberto Gutiérrez, Raúl Arévalo, que también aspiraba a esa distinción.