Octubre Corto reivindica a las abuelas

Premiada también en un buen puñado de certámenes, el 24 Festival de Cine de Arnedo Octubre Corto se unió a la reivindicación de las abuelas que hace la bilbaína Estibaliz Urresola en 'Cuerdas' otorgándole en la noche de este sábado el premio al mejor corto de ficción, dotado con 2.000 euros, trofeo Aborigen y calificación para los Premios Goya.

«Sin apenas discutir, el jurado hemos querido valorar el equilibrio que ofrece entre el drama de la historia con la vitalidad de las actrices, lo compacto de la película, donde forma y contenido van a la par, huyendo de subrayados para construir una historia sobre la dignidad que rezuma frescura y naturalidad», explicó en nombre del jurado la escritora Aloma Rodríguez. De la misma opinión que el jurado oficial fue también el jurado joven riojano, que le entregó el premio IRJ.

No fueron los únicos premios que recogió su equipo en la gala de clausura en el arnedano Teatro Cervantes con la conducción del actor Nancho Novo, pues Begoña Suárez y todo el elenco femenino del corto recibió el premio a la mejor actriz, dotado con 500 euros. Por su parte, el premio al mejor actor fue para Ramón Barea, «un trabajo lleno de matices que traspasa» en 'La entrega', de Pedro Díaz.

El público ovacionó a la cinta triunfadora y también a la que mereció su premio, el del corto más popular, para '36', dirigido por Ana Lambarri y dotado con 1.000 euros y trofeo. El público también eligió los ganadores de dos secciones dotadas con 500 euros cada una: el mejor Corto de Origen Rioja fue para 'Cristiano', de Adán Pichardo, y el premio Realidades de temática social fue para 'Sorda', de Nuria Muñoz-Ortin y Eva Libertad.

Junto al premio al mejor de ficción, Octubre Corto entregó galardones al mejor corto documental para 'Oro rojo', la denuncia de Carme Gomila sobre la situación que viven las mujeres marroquíes recogedoras de fresas en Huelva, y al mejor de animación para 'Ur azpian lore' ('Flor bajo el agua'), de Aitor Oñederra sobre la realidad de las mujeres emigrantes obligadas a abortar, dotados con 500 euros y trofeo. En ambos, el jurado valoró la forma y relatos diferentes en cada corto de abordar temas tan duros.

Detrás de las cámaras –con premios para cada uno de 500 euros–, la mejor dirección recaló en Mikel Gurrea por 'Heltzear'. «Nos ha fascinado su original caligrafía al mostrar una actividad como la escalada mientras de fondo resuena el conflicto vasco», explicó el actor Dani Pérez.

El mejor guión fue para 'Can Gardell', creada por Raquel Fernández para la dirección de Silvia Subirós y Florencia Alberti, por su relato sensible rebosante de humor del mundo rural. Además, también mereció la nueva distinción de esta edición al mejor corto de sostenibilidad «por la frescura de su enfoque».

La mejor fotografía fue para 'Memory', dirigida por Nerea Barros por la fuerza y poesía de sus imágenes para reflexionar sobre el legado familiar y el cambio climático.

Junto a las sorpresas y emoción de los triunfadores, la ilusión y agradecimiento del actor y cantante Asier Etxeandía al recibir el Premio Ciudad de Arnedo. «Volver a Arnedo es volver a casa. Me unen muchas cosas con Arnedo, la llevo en el corazón, gracias a trabajar con Chema León y Blanca Portillo en una época muy potente, en la que me formé como artista», agradeció por el reconocimiento a sus trabajos y su amistad.

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