«Nos hemos convertido en unos señores mayores juntos»

"Las aguas están volviendo a su cauce, la gente pensaba que se iba a acabar la música pero ni se va acabar el mundo ni se va a acabar la música porque se dejen de vender cedés o se piratee en la red. La gente sabe que bajarse un disco perjudica a un sector, a una industria y a los artistas. Hay más conciencia ahora que cuando el 'todo gratis' y ven que no nos hace gracia que nos roben de esa forma", analiza Dani Mezquita, mientras sus compañeros de batalla asienten con la cabeza acomodados en el mismo sofá.

La banda celebra tres décadas de carrera con '30 años y un día', una antología que recopila rarezas, éxitos remasterizados y temas inéditos comprimidos en tres cedés y un deuvedé en formato de lujo. Un regalo para los fans que repasa temas de la primera etapa como 'Venezia', otros como 'Un minuto nada más' que marcaron el respiro de diez años que se tomó el grupo y otros como 'Lo noto', la canción que les trajo de vuelta en 2002 y que demostró que el furor por los 'Hombres G' seguía latiendo. Todo ello acompañado de 21 canciones entre rarezas e inéditas, videoclips e imágenes de los archivos de RTVE.

«Éramos más libres en los 80»

El ejercicio de búsqueda, relata David Summers, les descubrió canciones que ni siquiera recordaban haber hecho durante los frenéticos años de éxito que disfrutaron en sus inicios. "Hemos cogido canciones atemporales y que no suenan viejas para nada", explica. Otras muchas no pasaron el filtro. "Eran una mierda o la letra era demasiado fuerte, irreverente y no venía al caso; tuvimos un origen muy punky y, en los años 80, era mucho más libre que ahora", analiza Summers.

La celebración incluye las tres décadas desde su origen, sin contar el parón del grupo desde 1992 -cuando se despidieron con la oscura 'Historia de un biquini'-, hasta su vuelta oficial en 2002. Aseguran que su amistad, sin embargo, se ha mantenido intacta en estos 30 años. "La hemos curtido con viajes y experiencias que nos han ayudado a hacernos hombres; empezamos siendo unos chavalines y nos hemos convertido en unos señores mayores juntos", resume Summers. "Estamos en una edad fantástica -añade Rafa Gutiérrez-, recogiendo los frutos de lo que hemos estado sembrando desde los 80, con futuro y con muchas cosas en la mano".

Hacer historia

Trece discos, cinco libros, dos películas, un musical y hasta un documental convierten a Hombres G en un grupo pionero en la música española, que alcanzó un éxito tanto en España como en Latinoamérica que perdura y que no parece destinado a repetirse con una banda de rock and roll. "Ha habido fenómenos de fans sobre todo con cantantes solistas, pero lo que vivimos no creo que se vuelva a repetir, al menos con nosotros no, con otros chavales quién sabe", aventura Javi Molina, que añade que "los que duran en el tiempo son los que han hecho canciones buenas, no éxitos de cinco minutos".

Sin aferrarse a la nostalgia, admiten echar de menos los tiempos en los que la industria era "una realidad". "Sacabas un disco y había 500.000 tíos que iban a la tienda y se lo compraban e iban a verte tocar. Ahora es más importante que tu canción se escuche mucho en la radio a que se venda mucho en las tiendas", lamenta Summers. "Pero cuando llegas a una plaza de toros y está llena dices: joder, esto es real, se han gastado 25 euros para vernos cantar en directo y vamos a hacerlo como dios manda, como debe ser y como toda la vida se ha hecho en el rock & roll. Por eso a la gente le gustan tanto, porque son de verdad".