Rosendo, en buena compañía

Ha vendido ya cinco mil entradas pero incluso al 'jefe' le inquieta la responsabilidad. «Para que esto tenga sentido tendrá que haber entre ocho y diez mil personas». Las habrá con creces, pero el veterano vocalista y guitarrista de 'Ñu' y 'Leño' sabe, con treinta años de carrera en solitario, que «los tiempos para la música son hoy peor que malos». «Vender un disco es casi imposible y tampoco es fácil vender una entrada con el IVA disparado». «Gracias señor Wert por ponérnoslo tan fácil siempre» ironizó.

«Pero los músicos no somos una excepción -apuntó- y los tiempos son malos para todos; hay que aguantar, poner buena y cara y vencer las dificultades, que son muchas». «Nada ha sido nunca fácil en el mudo el música, y menos ahora, así que adelante con los faroles» se jalea.

Luce la misma melena cuando se echó la carretera con grupos como 'Patata química', 'Yesca' o 'Fresa', aunque ahora blanquea. Para dejar claro que el tiempo pasa, ha decidido que su hijo Rodrigo sea su telonero en un concierto histórico para el músico y compositor. De manos de su hijo recogió también un simbólico disco de platino con el que su discográfica, Warner, le agradece tres décadas de carrera en solitario y un año de gran actividad en el que celebra «cumplir sesenta tacos».

Lo que no cambia es su actitud. Con camiseta, vaqueros y arete de pirata presentó el concierto con un botellín de cerveza en una mano y un pitillo en la otra en el túnel de acceso de la Puerta Grande al coso de Las Ventas. «La evolución es inevitable, aunque básicamente sigo dejándome llevar por el instinto cada vez que hago un disco. No sé bien que ha cambiado en estos años. Cuento lo que vivo cada día. Es mucha carretera, y supongo que debe notarse, como yo noto los años y los kilos».

Legendario

Ofrecerá «cinco o seis canciones nuevas» de 'Vergüenza torera' «además de los temas inevitables y un picoteo del resto del repertorio». Será el cuarto disco en directo de la carrera en solitario del autor de himnos del rock urbano como 'Agradecido' o 'Pan de higo' y quiere que sea tan legendario como que grabó hace tres lustros en la ya clausurada cárcel de Carabanchel poco antes de ser demolida, o el que registró en el Palau de la Música de Barcelona hace sólo tres años. «Los directos en sitios especiales tienen su encanto. He tocado otras veces en Las Ventas y acompañado, pero, ¿qué lugar mejor que esta para presentar un disco titulado 'Vergüenza torera'?» dice un Rosendo que no es muy torero. «Me gusta el lenguaje taurino, de largo recorrido, tradición y peso, pero la sangre me da mucho miedo. Solo uso la plaza de toros como escenario».

No votó en las últimas elecciones pero se confiesa «encantado con el revulsivo» provocado por la marea de votos para 'Podemos', la formación que lidera Pablo Iglesias. «Es necesario para que la gente se conciencie de que hay que mover el culo y empezar a plantarse ante el desfalco a los ciudadanos. Estoy encantado de que estén ahí dando caña, aunque no estoy con ellos porque no soy muy politiquero ni tengo suficiente información», insitió.

Fundador de grupos como Ñu y Leño, la carrera en solitario de Rosendo Mercado Ruiz (Madrid, 1954) arrancó en 1985 con un potente y recordado álbum, 'Loco por incordiar.' Ha publicado desde entonces una veintena de discos, diecisiete de estudio y tres directos, y ha dejado su impronta en bandas como 'Barricada', 'Platero y Tú' y 'Los Enemigos'.

La gira, que en su etapa veraniega arrancó junio en Cáceres, le llevará en las próximas semanas a enclaves como el abulense Hoyos del Espino, donde tocara junto John Foguerty vocalista de la mítica Creedence Clearwater Revival. Tocará también en Torre del Mar (Málaga), Santander, Barakaldo (Vizcaya), Vitoria, Villena (Alicante), Velilla del Río Carrión (Palencia), Guadalajara, Barcelona y Londres.