La pandemia ha concernido a Mario Alonso Puig (Madrid, 1955) en su triple faceta de médico de reputación internacional, de escritor y de conferenciante que llena grandes auditorios impartiendo lecciones de liderazgo, gestión de estrés y equilibrio personal; áreas todas ellas, además de la salud, ... básicas para salir enteros de la emergencia del coronavirus.
Publicidad
-¿Tiene el ser humano herramientas para afrontar una crisis así?
-Ante una situación tan única como esta, el ser humano puede activar dos patrones. El primero es el de supervivencia, que genera reacciones de agresividad, de huida o de bloqueo. Estas actitudes sirven cuando nos enfrentamos a un peligro físico, al ataque de un depredador, pero no frente a lo que está ocurriendo ahora. De hecho, son contraproducentes. Ahora debemos encender el segundo mecanismo, mucho más inteligente: el patrón de adaptación. Este patrón nos permite estar atentos y despiertos a la hora de actuar, pero no altera la capacidad mental. Así, tenemos que percibir la nueva realidad como una oportunidad. El virus sigue siendo contagioso y económicamente está generando un daño enorme, pero tenemos una opción. Frente a un tigre, no la tenemos.
-¿Se le ocurren ejemplos concretos de oportunidades?
-Personalmente, nunca había creído en la formación 'online', y al principio de la crisis me costó, pero ahora me veo supercómodo conectando con gente de muchos países. O las videoconferencias y el teletrabajo, que nos permiten pasar más tiempo con la familia, ahorro de dinero y de tiempo en viajes... En general, antes de la pandemia, nos encontrábamos en un mundo lleno de conflictos donde las relaciones humanas brillaban por su ausencia, y ahora valoramos más que nunca los contactos interpersonales. Aunque parezca que nos cuesta mucho o que es imposible, cada uno de nosotros tenemos que buscar nuestra oportunidad.
-El coronavirus ha mostrado las dos caras de la sociedad: la de los sanitarios y cajeros que se han dejado la piel y la de los insolidarios que ignoran las medidas de protección.
-Pensemos en una piscina. Por un lado, tenemos a gente que echa agua clara. Por otro, a quienes echan agua turbia. La calidad final del agua dependerá de si hay más gente que ha echado agua clara o, por el contrario, turbia. Yo tiendo a buscar el lado positivo y creo que la pandemia nos ha enseñado a distinguir la belleza de la fealdad y nos ha mostrado que la belleza es mejor que la fealdad.
-¿Qué le aconsejaría a quien quiera aprovechar la crisis para dar un vuelco a su vida?
-El éxito no es algo que se busca, sino que se atrae. Y para eso hay que cuidar las tres dimensiones humanas, cuerpo, mente y alma. El cuerpo, comiendo bien (dieta mediterránea), haciendo ejercicio, durmiendo más de siete horas... La mente, enfocándonos en lo que queremos, acabando con los lamentos, que dañan el organismo, y dejándonos sorprender por la vida. Decir 'yo no puedo' o 'qué desgracia' repele las oportunidades. Y, finalmente, el alma se cuida ocupándonos más de los demás y no solo de nosotros. Incluso en los momentos más difíciles, ayudar a otros nos empuja a seguir adelante, porque la persona que vive en gratitud no tiene miedo, es alegre y atrae la abundancia. Si el mundo interior y el exterior están en comunidad, si dentro de nosotros hay gratitud y generosidad, la vida nos responderá por los canales más alucinantes. Cuando algo nos sale bien, solemos decir que los astros se han alineado. En realidad, los alineamos nosotros. El gran poder del ser humano está en su capacidad de curvar la realidad.
Publicidad
-¿Qué puede hacer alguien que tiene a un familiar o a un amigo que lo está pasando mal?
-Nuestra vida es nuestro mensaje. Si alguien ve que, pese a las dificultades, yo sigo teniendo energía, me acabará preguntando cómo lo hago.
-¿Y como país? El ánimo colectivo de los españoles sale tocado.
-Mejoraríamos mucho si entendiéramos que en la unión está la solución. Podríamos ser el mejor país del mundo; lo tenemos todo, horas de sol, una gastronomía única, historia, profesionales en cualquier campo que no tienen que envidiar en nada a los extranjeros... Pero estamos constantemente enfrentándonos. Si somos capaces de dejar de lado egoísmos y divisiones y pensamos más en lo que nos une que en lo que nos separa, llegará un momento en que nos entenderemos y las cosas irán en la buena dirección.
¡Oferta 136 Aniversario!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.