Culturismo

Se trata de una producción francesa cuya acción se desarrolla en los Estados Unidos de América en el ámbito del culturismo. El Heaven Contest es la cita anual de atletas fisiculturistas. En este concurso participa una mujer, Lea Pearl (Julia Föry), dispuesta a conquistar el máximo trofeo. Su entrenador es Al (Peter Mullan), un monitor estricto y canalla que ya conoce las mieles del éxito.

Los primeros compases de la historia, con una cámara pegada al cuerpo de la protagonista, que exhibe su brutal musculatura, revela la exigente preparación física de la participante. La tortura para ajustarse a los requisitos de la prueba requiere un feroz entrenamiento y una dieta tenaz.

El preparador ha diseñado a su criatura para ganar y no admite ninguna distracción en su pupila que pueda echar al traste con sus aspiraciones vanidosas. Sin embargo un pequeño inconveniente va a alterar el estado moral de Pearl. Aparece en escena el exmarido de la deportista y su hijo de apenas ocho años.

Un giro de guion aumenta la tensión en la corta trama argumental y revienta el ánimo de Al. El largometraje explora los sentimientos maternales de Pearl a la vez que asistimos a sus contradicciones. En los instantes cruciales entre el ascenso o la caída se palpan temas como el complejo de culpabilidad y la redención asoma. La película muestra el lado humano, se hace fuerte y la cineasta filma un ejercicio estético muy expresivo alternado con ramalazos de emoción.