Laguna reivindica su blues

«Está todo muy en el aire y, por supuesto, este año no se hace», lamenta el alcalde de Laguna de Cameros, Martín Íñiguez. El Cameros Blues Festival nació en 2013, sobre todo gracias al apoyo de todos los vecinos del pueblo, unidos en la Asociación de Amigos de Laguna de Cameros, aunque la organización la asume Tomás García. Se celebraron seis exitosas ediciones, con una sobresaliente respuesta del público y calidad en las propuestas musicales y artísticas. Pero el paréntesis abierto en 2019 costará cerrarlo y al menos hasta 2021 no se podrá celebrar la séptima edición, en la que estaba trabajando la organización.

Martín Íñiguez ha realizado ahora un llamamiento público a las autoridades para recuperar el Cameros Blues Festival porque «era un motor de riqueza para la zona, aparte de un evento cultural a nivel internacional». El alcalde de Laguna reclama al Gobierno regional que «no dé la espalda al festival» y recuerda que «además de dar prestigio y riqueza, era una importante herramienta contra la despoblación».

Ciertamente, para llegar hasta Laguna es necesario recorrer todo el Camero Viejo o el Nuevo, por lo que permite descubrir estos valles en los que se encuentra el parque natural Sierra de Cebollera, la Reserva de la Biosfera de La Rioja y la Red Natura 2000. El festival recibió el reconocimiento como Mejor Iniciativa de Desarrollo Rural de los V Premios La Rioja Capital en 2019 y, sin embargo, poco después se anunció que no se celebraría la séptima edición.

«Nos han estado tomando el pelo y mareando argumentando que, como los Presupuestos se han prorrogado, no tienen capacidad para apoyar el festival, pero lo cierto es que, año tras año, nunca han querido firmar un convenio ni colaborar económicamente», explicó entonces Íñiguez. La organización se despedía con estas palabras: «Conseguir organizar un festival internacional de blues gratuito en un pequeño pueblo como Laguna de Cameros es, a priori, una misión prácticamente utópica [...]. Lamentablemente, el desánimo y la falta de implicación institucional han podido más que la ilusión».